Un golpe mañanero de la CNTE (a través de su expresión guerrerense) tuvo respuesta el mismo día por parte del mismísimo Andrés Manuel López Obrador. Poco después de que uno de los foros educativos (organizados por Estaban Moctezuma) fuera cancelado por la irrupción violenta de docentes inconformes a la sede acapulqueña donde se realizaba, la respuesta llegó desde Zacatecas.

El foro en Acapulco se suspendió, pero la CNTE recibió un golpe mayor unas horas después, cuando el Presidente Electo señaló que un punto de la Reforma se queda y es el control federal de las nóminas. En Oaxaca, Guerrero y otros estados donde la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), el manejo de las nóminas fue fundamental para que los sindicalistas tomaran decisiones que legalmente correspondían a las autoridades educativas.

López Obrador refirió, en un discurso ante simpatizantes, que iba a cumplir a cabalidad con la cancelación de la Reforma Educativa, pero que sólo un punto de las reformas legales en el sector se iba a quedar tal y como estaba: el control de los sueldos de los profesores desde el Gobierno Federal.

Indicó que va se va a “abrogar”, “abolir”, “cancelar” la “mal llamada” Reforma Educativa, y aclaró que si usaba sinónimos era para que no quedaran dudas sobre que significaba todo eso a la vez, que no habrá medias tintas en ello. Entonces vino el golpe a una de las aspiraciones más notables al interior el sindicato magisterial y sus expresiones como la CNTE:

“Lo único que va a quedar es el manejo de la nómina que lo va a seguir teniendo el Gobierno federal, para que le llegue el dinero a los maestros y para que les llegue el aumento”.

Fuente: Crónica

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