Canadá se ha convertido hoy en el primer país industrializado y el segundo del mundo, tras Uruguay, en legalizar el consumo recreativo del cannabis, que será comercializado con un precio medio de unos 6,7 euros por gramo.
Decenas de tiendas en todo el país, reguladas por las autoridades sanitarias canadienses, comenzarán a vender de forma legal marihuana a los mayores de 18 o 19 años de edad, dependiendo de la provincia.
En algunas regiones se teme que la demanda inicial sea superior a la oferta a pesar de que las empresas que han recibido licencia del Gobierno canadiense para producir cannabis han estado trabajando a marchas forzadas en las últimas semanas para producir la máxima cantidad posible de marihuana.
El Gobierno ha sugerido un precio de venta de unos 10 dólares canadienses (unos 6,7 euros) por gramo de marihuana para que el coste del cannabis legal sea competitivo con el del mercado negro.
Este precio incluye dos impuestos: uno de 1 dólar canadiense por gramo o del 10 % del precio de venta final, dependiendo de cuál sea el más elevado; y el impuesto provincial de venta de cualquier producto que varía entre el 13 y el 15 %.
Pero el precio del cannabis variará con el tiempo, dependiendo del coste que tenga la marihuana en el mercado negro.
Las autoridades canadienses prevén que, pese a que el precio final de un gramo de marihuana será casi un 25 % superior al del mercado negro, los canadienses preferirán adquirir cannabis en las tiendas oficiales porque ofrece garantías como el nivel de THC, el componente psicoactivo de la droga.
Una encuesta dada a conocer hoy señala que cuatro de cada 10 canadienses opinan que el precio determinará si compran marihuana a través de los canales legales o en el mercado negro. La encuesta, realizada por la empresa Ipsos, indica que el precio ideal para los compradores de marihuana en la provincia de Ontario, la mayor del país, es entre 10 y 14 dólares canadienses por gramo (entre 7,7 y 10,7 dólares estadounidenses).
Las tiendas de la costa atlántica de Canadá, que por los husos horarios serán las primeras en abrir sus puertas el miércoles, han establecido tres niveles de marihuana con distintos precios.
En la provincia de Nueva Escocia, la droga se venderá en 12 tiendas del monopolio provincial de venta de alcohol (NSLC) junto con vino y otras bebidas alcohólicas. La provincia de Nueva Brunswick, también en la costa este de Canadá, ha establecido un abanico de precios de entre 7,5 y 14,99 dólares canadienses (5,7 y 11,5 dólares estadounidenses).
El Gobierno de la provincia de Nueva Brunswick ha creado la empresa pública Cannabis NB, que comercializará la marihuana en tiendas físicas y por internet. Cannabis NB tiene un catálogo de 76 productos y en su página web ofrece información tan variada como la forma apropiada de liar un cigarrillo de marihuana o cómo almacenar la droga para que mantenga su frescura.
Según señalaron el martes varios medios de comunicación, el Gobierno del primer ministro Justin Trudeau indultará a los individuos condenados en el pasado por posesión de hasta 30 gramos de marihuana. Se estima que cientos de miles de personas se pueden beneficiar de la medida.
Trudeau ya adelantó sus intenciones el martes a preguntas de periodistas: “Vamos a trabajar en eso como ya he anunciado, tan pronto como la legalización entre en vigor”.
Para muchos canadienses, el historial criminal por la posesión de marihuana para uso recreativo les supone no poder viajar a Estados Unidos. Una condena por posesión de marihuana permite a los agentes fronterizos estadounidenses impedir el acceso a su país a los residentes canadienses ya que Ottawa comparte con Washington la base de datos que contiene todo el historial criminal de Canadá.
Precisamente hoy, un portavoz de la agencia de Aduanas y Protección Fronteriza de EE.UU., Todd Owen, afirmó en una teleconferencia con periodistas canadienses que la amnistía no garantizará que las personas con historial criminal por posesión de marihuana puedan entrar en territorio estadounidense.
Owen también señaló que la simple admisión en la frontera de que un individuo ha consumido marihuana en algún momento en su vida es motivo suficiente para impedir la entrada en el país.
El uso recreativo de la marihuana es legal en nueve estados de EE.UU., además de en la ciudad de Washington.
Fuente: La Vanguardia