“A ver, los personajes de Morena fuertes en Veracruz son Rocío Nahle, Cuitláhuac García y Ricardo Ahued,, en ese orden. Indudablemente es muy temprano para hablar de sucesión en tu estado, en 3 años podríamos abordar un poco el tema, sin embargo, en este momento sólo hay dos perfiles, y ambos tienen candados constitucionales que les impedirían gobernar, pero con tanto tiempo por delante, todo puede cambiar”. No cabe duda que las sobremesas siempre resultan enriquecedoras, de hecho, en muchas ocasiones, es ahí donde suelen salir los más interesantes datos. En aquella reunión estábamos acompañados por dos morenistas, un priísta, un verde y un panista, todos ellos habitantes del Senado y el Congreso de la Unión. “En estados como Veracruz y Morelos, Morena corre el riesgo de perder adeptos por la gran expectativa que los ciudadanos tienen en sus gobernadores electos; yo creo que Cuauhtémoc Blanco y Cuitláhuac García podrían fallar, si no se rodean de buenos colaboradores; y como se acabarán equivocando, ahí el PRI volverá a ganar”, dijo, por supuesto, un tricolor. “De hecho, lo mismo pasará en la Presidencia, la expectativa es tan alta que AMLO no podrá cubrirla, más aún con lo pésimo que están actuando sus líderes en el Senado y el Congreso de la Unión; vaya, ya empezaron a quedar mal con sus promesas de campaña, ahí es donde nosotros volveremos a la cúspide”, recalcó el priísta. Del otro lado de la mesa, uno de esos líderes morenistas engallados no tardó en refutarle, sin empacho alguno. “A ver, amigo priísta, cuando tengan más espacio en las cámaras platicamos, mientras tanto, no tienes eco alguno. Te lo pongo así, que EPN desperdiciara la popularidad con la que entró no quiere decir, para nada, que pasará lo mismo con AMLO. Después de él vendrán 6 años más con uno de los que llevamos el Senado o el Congreso”. Y entonces allá, el panista, riéndose a todo pulmón, gritó, mientras palmeaba en la mesa. “Al paso que van, el único con popularidad suficiente para candidato será el Cuau, y recen porque no desconozca a Morena por completo y acabe yéndose de independiente. Ese sí le puede ganar a cualquiera; al cabrón le sale todo, hasta acaba de meter dos goles en la despedida del Estadio Azul”. Otro morenista, ubicado en la esquina de la mesa, mismo que había permanecido callado por un buen rato, metido en su celular, al oír el tema de Blanco quiso participar. “Señores, no se sorprendan si el que acaba inaugurando el Mundial dentro de 8 años es el ídolo de los americanistas, pero si en un hipotético caso lo hace, tendría que ir cobijado por AMLO, pues no le alcanzaría para ganar una Presidencial”. Entre mofa y seriedad mezcladas, la charla terminó recordando los mejores goles del nacido en el barrio de Tepito. Falta mucho, (y no deja de ser sólo una plática de sobremesa) pero inevitablemente ya se barajan algunos nombres para suceder a AMLO, y claro, a Cuitláhuac García, en Veracruz. No es tiempo de hacer apuestas, pero siempre hay espacio para jugar al adivino.