El presidente Enrique Peña Nieto aseguró que el reto de seguridad en el país es frenar el flujo de armas y dinero proveniente de Estados Unidos, a fin de disminuir las capacidades de operación de los grupos de la delincuencia organizada.
De gira por Tamaulipas, donde inauguró el Libramiento Reynosa Sur II y la carretera Matamoros-Nuevo Laredo, Peña dijo que en 2005, cuando la nación vecina liberó la venta abierta de arsenal de asalto “se fortaleció” a las bandas criminales.
“Por eso el esfuerzo conjunto y compartido que debemos hacer con las autoridades de los Estados Unidos para frenar ese flujo ilegal de armas y dinero en efectivo, que sin duda, fortalece las capacidades de operación de las organizaciones criminales”.
“Compartía con el señor gobernador (Francisco Javier García Cabeza de Vaca) que justamente cuando Estados Unidos liberó la venta abierta, en el 2005, de armas largas, de armas de asalto, eso se proyectó en el fortalecimiento del crimen organizado y su capacidad de operación con armas de mayor capacidad y alto calibre”. “Sigue siendo un gran reto el cómo enfrentar al crimen organizado y cómo disminuir y abatir sus capacidades de operación”, aseguró.
El Presidente dijo que Tamaulipas ha sido estigmatizado por “algunos” hechos de violencia que se han suscitado y se comprometió con que el estado contará con el respaldo pleno de las Fuerzas Armadas y de las instituciones de seguridad pública del gobierno federal hasta el último día de su mandato para garantizar la paz y seguridad de los ciudadanos.
“En algunos lugares de Tamaulipas se vive inseguridad y de violencia. En el caso de Tamaulipas, a veces ha sido más señalado o estigmatizado por algunos hechos de violencia que se han registrado en este estado”, consideró.
Fuente: Excélsior