María del Tránsito Zamora identificó a su hijo José Guadalupe Cruz Zamora entre los cuerpos que permanecían en dos tráileres frigoríficos en Jalisco, ante la falta de espacio en el Servicio Médico Forense (Semefo) del estado.

De los 322 cuerpos que permanecían en cajas frigoríficas de Jalisco, solo se ha identificado a José Guadalupe Cruz Zamora. Aunque su madre pudo depositar sus restos en el Panteón de Guadalajara, no descansa en la búsqueda, pues su nieto sigue desaparecido.

José Guadalupe Cruz Zamora, de 37 años, viajaba con su hijo Daniel Alejandro Cruz, de 18 años, por el municipio de El Salto, en la región centro de Jalisco. Lo último que supo María de ellos fue cuando habló con José Guadalupe el domingo 20 de mayo.

”La última llamada que me dio fue el domingo 20 a las 9 de la mañana porque yo estaba enferma, me dijo ‘mañana voy a ir para llevarte con el doctor’, y me dijo ‘dame tu bendición'», contó María del Tránsito a Milenio.

María del Tránsito Zamora no tardó mucho en encontrar pistas sobre el paradero de José Guadalupe. El 7 de junio, las autoridades revelaron el hallazgo de una fosa clandestina con 8 cuerpos en la calle Miami de la colonia Lomas Aeropuerto en El Salto, el mismo municipio de donde se comunicó su hijo por última vez.

El 13 de junio, María acudió al Instituto de Jaliscience de Ciencias Forenses para localizar a su hijo y su nieto. «Todo se me subió de ver que eran ellos, me vine con un dolor en mi pecho de saber que estaban ellos ahí, pero no podía identificarlo porque estaban en ácido», contó a Milenio.

Tuvieron que pasar tres meses para que María del Tránsito Zamora supiera que el cuerpo de su hijo había sido plenamente identificado. Aunque pudo enterrarlo, aún desconoce las razones de por qué murió José Guadalupe. En su acta de defunción solo se indica que falleció el 7 de junio de 2018.

Aunque ya pudo enterrar a su hijo, María cree que entre los 321 cuerpos que faltan por identificar podrían estar los restos de su nieto Daniel Alejandro.

Fuente: Excélsior