Una banda delictiva integrada por al menos una docena de niños y adolescentes, identificados por agentes policiales como Los Diablitos, opera en la Avenida Constituyentes a la altura del Papalote Museo del Niño, donde cometen atracos a automovilistas desde hace más de un mes. La policía capitalina también tiene ubicada como otra zona de operación las colonias Observatorio y Daniel Garza.

El pasado 31 de agosto los padres de algunos de estos menores de edad pasaron a recogerlos a la agencia del Ministerio Público tras haber sido detenidos por agentes de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) después de haber amagado con una pistola de juguete a un conductor.

En menos de una semana los volvieron a capturar, pero nuevamente los soltaron, pues por la edad no se les imputó ningún cargo y la Procuraduría General de Justicia (PGJ) los entregó de nueva cuenta a sus familiares.

En esta ocasión captaron en video el momento en que un par de ‘Los Diablitos’ asaltan al conductor de un vehículo marca BMW que circulaba sobre la avenida Constituyentes, en la delegación Miguel Hidalgo. Se informa que la PGJ y la SSP ya los buscan.

Han detectado que la mayoría de estos menores viven en una vecindad ubicada en la calle General Rincón Gallardo casi esquina con General Alatorre.

De acuerdo con el modus operandi, estos adolescentes se aprovechan del tránsito que se genera en los alrededores de Periférico y en calles aledañas montan “retenes”, donde colocan conos color naranja para generar más congestionamiento vial y en ese momento detectan a sus víctimas.

Se sabe que el papá de uno de los menores, lejos de ponerle un correctivo a su hijo, amagó con demandar al personal de la PGJ por retenerlos después de uno de los robos que cometieron.

Los padres de los menores coincidieron en señalar que los actos de sus hijos eran únicamente ‘travesuras de niños’.

Al respecto, el Procurador General de Justicia capitalino, Edmundo Garrido, informó que buscarán quitar la patria potestad a los papás de estos menores, basados en lo que arroje la carpeta de investigación ya señalada.

Fuente: Excélsior