El sismo registrado hace un año parece haber dejado más daños psicológico-emocionales que físicos a los capitalinos, según revela una encuesta de El Financiero en la Ciudad de México, a un año del 19 de septiembre.
El sondeo revela que 9% de los entrevistados sufrió daños graves en su hogar y 13% reporta haber tenido daños graves en su lugar de trabajo.
En contraste, el 32% asegura haber sufrido daños graves en el aspecto psicológico-emocional. Sumado al 42% que reporta haber tenido trastornos menores, el daño emocional alcanza al 74% de los entrevistados, es decir, tres de cada cuatro capitalinos.
Los daños graves o menores en el hogar suman 42%, y en el lugar de trabajo alcanza 37%. La marca más fuerte del pasado 19 de septiembre no quedó en las paredes, sino en la conciencia de los habitantes de la Ciudad de México.
Según la encuesta, el 54% de los consultados dice que la fecha 19 de septiembre le produce mucho o algo de temor, mientras que el 63% siente miedo ante la idea de escuchar la alarma sísmica, la cual está programada, por cierto, para sonar el día de hoy, después de la 1:15 de la tarde, en conmemoración al movimiento telúrico del año pasado.
Ante la idea de que suene la alarma sísmica, el 46% opina que es buena idea, pero la mayoría, 51%, cree que es mala idea sonar la alarma para ese propósito.
A un año del terremoto de 7.1 grados en la escala Richter, 12% de los entrevistados opina que la gente está muy preparada en caso de que haya otro temblor importante. El 33% señala que la población está algo preparada. Sin embargo, 55% cree que el nivel de preparación ante los movimientos sísmicos es poco o nulo.
Según el sondeo, el 50% suele tomar precauciones en caso de un temblor, siendo las mujeres (53%) ligeramente más propensas a ello que los hombres (48%). El 49%, según la encuesta, no toma ninguna precaución.
Entre las precauciones que toman los capitalinos, el sondeo revela que 65% suele preparar documentos y dinero; el 52% hace rezos u oraciones para sentirse protegido; el 40% suele tener preparada una mochila de emergencia, y el 29% tiene una aplicación que le avisa de algún sismo.
Metodología: Encuesta en la Ciudad de México realizada por vía telefónica a 420 adultos los días 14 y 15 de septiembre. Se hizo una selección probabilística y una generación aleatoria de números residenciales en las 16 delegaciones. El margen de error de las estimaciones es de +/-4.8 por ciento. Los resultados reflejan las opiniones de los adultos de la Ciudad de México que tienen una línea telefónica residencial.