La renegociación del Tratado de Libre Comercio de América de Norte (TLCAN) cumple un año envuelto en constantes reuniones y problemas, sin ofrecer progresos significativos de cara a un nuevo acuerdo comercial entre México, Estados Unidos y Canadá.
Exactamente hace doce meses el representante de Comercio Exterior de Estados Unidos, Robert Lighthizer; el secretario de Economía de México, Ildefonso Guajardo, y la ministra de Asuntos Exteriores de Canadá, Chrystia Freeland, arrancaron las conversaciones en Washington para renovar el pacto, en vigor desde 1994.
El impulso para renegociar el TLCAN, considerado como un éxito para la integración comercial por los gobiernos de los tres países hasta entonces, fue la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, quien lo ha calificado reiteradamente como un “desastre”.
Desde el inicio en agosto de 2017, la diferencia de intenciones entre las partes era notable, pues Estados Unidos buscaba una renegociación completa, mientras que México y Canadá apostaban por una actualización y modernización.
En un primer momento, Washington estimó que se llegaría a un acuerdo para comienzos de 2018, algo que pronto quedaría desestimado.
Posteriormente, la meta se recorrió a la primavera, también sin éxito. Posteriormente, se marcó como objetivo las elecciones en México del 1 de julio, de las que resultó ganador Andrés Manuel López Obrador.
El gobierno de Trump insiste en un imponer una cláusula que obliga a revisar el acuerdo cada cinco años, algo a lo que Canadá y México se oponen fuertemente.
El viernes, Guajardo y Lighthizer concluyeron una nueva reunión de trabajo en Washington, con propósito de acercar las posturas entre ambas naciones y así retomar pronto las conversaciones con Canadá.
Fuente: EFE