Fernando Alonso se retirará de la Fórmula 1 cuando termine la temporada 2018. El asturiano ha hecho el anuncio a las 17:00 horas –una por cada temporada que ha disputado- del día 14 –su talismán y dorsal-. Sus días en la categoría reina del automovilismo llegan a su final. Se despedirá con dos títulos de campeón del mundo y un reglero de momentos para el recuerdo. Ahora emprenderá nuevos retos deportivos.
Alonso tenía 19 años cuando debutó en Fórmula 1 en 2001. Quería comerse el mundo y lo consiguió. Cuando caiga el telón en el GP de Abu Dabi, Fernando Alonso se despedirá como un bicampeón que ha dejado una huella imposible de borrar, como el segundo piloto con más carreras en la historia del deporte -314- y con 32 victorias en su palmarés.
Dirá adiós sin conseguir el tan ansiado tercer Mundial, un objetivo esquivo que acarició con Ferrari y que buscó por todos los medios con McLaren, donde esperaba contar con los medios necesarios para regresar a lo más alto. La delicada situación técnica del equipo y la falta de competitividad del motor Honda le impidieron disponer de tal oportunidad.
Se marchará con el respeto de todo el paddock. Pilotos, ingenieros y jefes de equipo coinciden en que es uno de los mejores talentos de su generación, sino el mejor. Así lo expresan repetidamente cada temporada, a pesar de que hace tiempo que el asturiano no tiene un coche a la altura de sus ambiciones deportivas. También tiene el respeto de la afición, que aplaude su valentía al atreverse en carreras como Le Mans o Indianápolis.
La retirada de Fernando Alonso era un rumor recurrente en los últimos meses, un rumor alimentado por los problemas de McLaren y la imposibilidad de competir con un buen monoplaza. El piloto había verbalizado en múltiples ocasiones la frustración que le generaba el saber que sus resultados eran tan dependientes de su máquina, en tanto que se sabía tan rápido como el primer día.
El despido de Ron Dennis y la contratación de Zak Brown propició un nuevo capítulo en la carrera profesional de Alonso. Consciente de que los siete títulos de Michael Schumacher eran inalcanzables, buscó una ruta alternativa para afianzarse en el Olimpo del automovilismo: la Triple Corona.
En mayo de 2017 sacrificó el GP de Mónaco para competir en las 500 Millas de Indianápolis. Su presencia ahí se convirtió en un auténtico fenómeno mediático. Su adaptación a los óvalos sorprendió a propios y extraños. Lideró 27 vueltas de la carrera, pero una rotura de motor le impidió pelear por la victoria.
En 2018 se embarcó en el Mundial de Resistencia como piloto oficial del equipo Toyota, con quien se estrenó con victoria en las 6 Horas de Spa-Francorchamps. Debutó y conquistó las 24 Horas de Le Mans en su primera participación con una actuación memorable, coronada por un stint nocturno endiablado que fue determinado para el resultado final.
«Después de 17 maravillosos años en este deporte fantástico, ha llegado la hora de hacer un cambio y de seguir adelante. He disfrutado de todos y cada uno de los minutos durante estas temporadas tan increíbles y no puedo estar lo bastante agradecido con todas las personas que han contribuido a que fueran tan especiales».
«Todavía quedan siete Grandes Premios esta temporada, y participaré en ellos con más compromiso y más pasión que nunca».
«Veremos qué depara el futuro. Nuevos y emocionantes retos están a la vuelta de la esquina. Estoy en uno de los momentos más felices de mi vida, pero necesito explorar nuevas aventuras».
«Quiero dar las gracias a toda la gente de McLaren. Mi corazón estará con el equipo para siempre. Sé que volverán más fuertes en el futuro y podría ser un buen momento para que yo vuelva a la categoría, eso me haría realmente feliz. He construido relaciones fantásticas con muchas personas de McLaren y me han dado la oportunidad de expandir mis horizontes corriendo en otras categorías. Me siento un piloto más completo que nunca».
«Tomé la decisión hace algunos meses y es una decisión firme. Aun así, me gustaría dar las gracias a Chase Carey y a Liberty Media por los esfuerzos que han hecho para que yo cambiase de opinión, y dar las gracias a toda la gente que ha contactado conmigo durante este periodo».
«También me gustaría dar las gracias a mis antiguos equipos, a mis compañeros, mis rivales, a los patrocinadores, los periodistas y a todas las personas con las que he trabajado en mi carrera en la Fórmula 1. Y, en especial, a los fans de todo el mundo. Estoy bastante seguro de que nuestros caminos se volverán a cruzar en el futuro».
Fuente: Soy Motor