Nadie hubiera imaginado ver a Lewis Hamilton en cuclillas, desconsolado, delante de su W09 antes de que finalizara la Q1 de la clasificación del Gran Premio de Alemania, luego de haber cometido un error que lo dejó fuera de combate.
En contraparte, ahí estaba Sebastian Vettel sacando una vuelta impresionante en la Q3 para detener el reloj en 1’11’212, marcar un récord histórico de vuelta rápida, y ganar la “pole” en el circuito de Hockenheim donde este domingo se disputará la decimoprimera carrera de la temporada que lidera el alemán.
Hasta Toto Wolff, el jefe de Mercedes, se sorprendió al ver por escasos segundos a Valtteri Bottas delante de todos, pero eso no duro ni un suspiro ya que Vettel superó por 204 milésimas de segundo a Bottas, que estuvo a punto de dar esta satisfacción a su equipo luego de haber renovado contrato por un año más con las flechas de plata.
Kimi Räikkönen también hizo un excelente fin de semana en los dos primeros ensayos, y no así en las Pruebas Libres 3, sesión que fue entorpecida por la intensa lluvia que cayó sobre Hockenheim. Solamente algunos coches se arriesgaron a salir a pista para probar los neumáticos de lluvia extrema.
Sin embargo, el otro corredor finlandés de la parrilla acabó en tercer lugar en la clasificación y seguramente meterá presión a Bottas en la largada, para contribuir a que Ferrari siga ampliando su ventaja en la tabla de constructores con respecto de Mercedes, al que supera por 20 puntos.
Red Bull se desinfló en la clasificación, que sólo pudo completar Max Verstappen al llegado con soltura a la Q3. El holandés también será una amenaza para Räikkönen desde la segunda fila de la parrilla de salida, mientras que Daniel Ricciardo partirá último al haber cambiado el tercer MGU-K de la unidad de potencia de su RB14. Se trata del motor que convierte la energía cinética de las frenadas en energía eléctrica.
El problema hidráulico que tuvo el coche de Hamilton lo obligará a arrancar desde la decimocuarta posición, de tal forma que el aguerrido británico deberá adelantar varios coches para tratar de meterse lo más adelante y ganar la mayor cantidad de puntos que lo acerquen a Vettel.
Varios equipos se beneficiaron del desaguisado sufrido por Hamilton, y también de la penalización que pesa sobre Ricciardo, así que tendrán oportunidad de obtener buenos resultados. Es el caso de los dos coches de Haas, la escudería norteamericana socia de Ferrari que sigue impresionando por su magnífico desempeño a manos de sus pilotos: Kevin Magnussen y Romain Grosjean, que largarán en quinto y sexto lugar, respectivamente.
Por su parte, otro piloto que este domingo correrá en casa, el alemán Niko Hulkenberg, lo hará desde la séptima posición a bordo de su Renault RS18, un puesto por delante de su compañero Carlos Sainz. Los dos monoplazas franceses rodaron con más ritmo que el Sauber de Charles Leclerc, la escudería suiza que está obteniendo excelentes dividendos con la conducción del monegasco, egresado del programa de pilotos jóvenes de Ferrari.
Force India tuvo un fin de semana desigual, y aunque Checo Pérez sí consiguió meterse a la Q3, acabó en el décimo lugar de la clasificación, a 1.562 segundos de Vettel. Esteban Ocon no pudo vencer al mexicano, como sí lo había hecho en las Pruebas Libres 2, y no entró en la Q2. El francés cayó hasta el decimoquinto lugar, desde donde largará.
Los problemas de la escudería de Vijay Mallya en 2018 han impedido que el equipo se mantenga en la cuarta posición del campeonato de constructores donde terminó en las dos últimas temporadas gracias a la consistencia del VMJ10, que fue un monoplaza muy consistente.
Fernando Alonso acabó decimoprimero y tendrá oportunidad de calzar neumáticos nuevos, a diferencia de los pilotos del top ten que, por reglamento, deben correr con los neumáticos utilizados en la clasificación.
El Gran Premio de Alemania depara atractivas emociones, y al margen de saber qué pasará en la largada, que siempre es el momento de más tensión de la carrera, los seguidores de Hamilton esperan que el británico saque la casta ante esta situación adversa en la que se encuentra.
Entretanto, los miles de fanáticos vestidos de color naranja que se desplazaron desde Holanda para apoyar a Max Verstappen, no se conformarán con ver a su piloto en cuarto lugar y desean que el impetuoso corredor de Red Bull logre descorchar una botella en el podio, ahora que llega a estas tierras precedido de una buena racha.
Fuente: Heraldo