A menos de un mes de haber aceptado la dirección técnica de la selección de España, Fernando Hierro y la federación de este país han roto su relación laboral.
La federación informó el domingo en un comunicado que la decisión obedeció a que Hierro había rechazado la posibilidad de cumplir el plazo restante de su contrato como director deportivo de la selección, el cargo que ocupaba antes de que la destitución del seleccionador Julen Lopetegui lo pusiera al frente de la Roja.
“Después de muchos kilómetros caminando juntos, la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y Fernando Hierro ponen fin a su relación, una vez finalizada la participación de España en el Mundial de Rusia”, señala el comunicado.
“El último seleccionador español declina regresar a su anterior cargo como director deportivo de la RFEF para buscar nuevos horizontes y emprender nuevos retos profesionales”, agrega el texto.
España cayó eliminada por penales ante la anfitriona Rusia en los octavos de final
La RFEF agradeció a Hierro por “su compromiso y sentido de la responsabilidad al ponerse al frente del combinado nacional en unas situaciones extraordinarias”.
Hierro llegó al banco de la selección apenas dos antes días de que ésta comenzara su participación en la Copa del Mundo enfrentando a Portugal.
El nuevo presidente de la RFEF Luis Rubiales se mostró indignado después de que el entrenador Julen Lopetegui aceptó la oferta para asumir como técnico del Real Madrid una vez que concluyera el Mundial
Concretamente, Rubiales le reprochó a Lopetegui que hubiera aceptado el cargo en el club merengue sin notificar antes a la RFEF. Se le destituyó sin más, a un día de la inauguración del Mundial y pese a que ostentaba una racha invicta de 20 partidos, que hacía lucir a España como una de las selecciones favoritas para coronarse en Rusia
La Roja empató con Portugal y Marruecos pero superó a Irán para clasificarse a los octavos de final, donde sucumbió.
Pese a la ruptura con Hierro, la RFEF resaltó los “valores profesionales y humanos” del exfutbolista de 50 años.
Fuente: La Razón