El Gobierno de Estados Unidos reúne hasta el día de hoy con sus padres a cuatro niños menores de 5 años que fueron separados de sus progenitores en la frontera con México, cuando se cumple la fecha límite de reunificación familiar dictada por una corte federal.
Hasta ahora, cuatro han sido reunificados. (…) Esperamos reunir a por lo menos 34 niños más hoy y a otros 16 próximamente», dijo en una conferencia telefónica con periodistas un alto cargo del Departamento de Salud de Estados Unidos, Chris Meekins.
El juez federal Dana Sabraw de San Diego (California, EU) determinó a finales del mes pasado que 102 niños menores de cinco años debían volver con sus padres antes de hoy, martes, y estableció que el resto (de 5 años en adelante) debe reunirse con sus familiares antes del próximo 26 de julio.
En un repaso sobre los últimos datos disponibles, Meekins señaló que catorce de los padres que fueron apartados de sus hijos en la frontera no son «elegibles» para volver a estar con ellos.
De ellos, cinco no son padres biológicos (tres de ellos lo admitieron antes de realizarse una prueba de ADN y dos se descubrieron tras los test), ocho tienen un «historial criminal serio», incluyendo cargos de asesinato y violación, y uno está acusado de abuso de menores.
El jefe de la Oficina de Detención y Deportación, Matthew Albence, por su parte, explicó que otros doce padres separados de sus hijos en la frontera han sido deportados, por lo que no se puede llevar a cabo la reunificación en Estados Unidos (EU).
En este caso, «es probable» que los niños sean reunidos con otros familiares que se encuentren residiendo actualmente en Estados Unidos, según Albence, que recordó que no está dentro su jurisdicción contactar con personas que se encuentran en otros países.
La Administración Trump inició en abril pasado su polémica política de «tolerancia cero» contra la inmigración, que llevó a separar de sus padres a cerca de 3.000 menores de edad -de los cuales medio millar ya fueron entregados a sus padres-, medida que fue finalmente suspendida a mediados de junio por las enormes críticas recibidas.
El propio presidente, Donald Trump, aseguró hoy que la solución a la crisis de los niños alejados de sus padres en la frontera con México es «que no vengan» a EE.UU. «ilegalmente».
Fuente: Excélsior