La Casa Blanca defendió hoy la decisión del presidente Donald Trump de imponer aranceles a las importaciones de acero y aluminio de Canadá, México y la Unión Europea (UE) y descartó que la medida afecte las relaciones con sus socios comerciales.
La administración Trump impuso aranceles del 25 por ciento a las importaciones de acero y de 10 por ciento a las importaciones de aluminio procedentes de Canadá, México y de la Unión Europea, lo que detonó acciones de represalia comerciales de sus tres socios comerciales.
Cuestionada por el hecho de que republicanos deploraron la decisión presidencial, la vocera defendió los aranceles bajo el argumento de que son apropiados y “críticos” para la seguridad nacional de Estados Unidos.
“Durante meses, Estados Unidos ha tenido discusiones con Canadá, México y la Unión Europea para encontrar una alternativa. Sin una solución, los aranceles son las únicas medidas apropiadas para salvaguardar al país”, aseguró.
La perspectiva de la Casa Blanca surge después que tres organizaciones financiadas por los billonarios republicanos Charles y David Koch anunciaron una campaña mediática para denunciar los aranceles de Trump como lesivos a la economía estadunidense.
Los grupos Americans for Prosperity, Freedom Party y la hispana The Libre Initiative defendieron la importancia del libre comercio y el impacto perjudicial que tienen las barreras comerciales sobre los consumidores, la creación de empleos y la economía en general.
México anunció por su parte que iniciará un proceso de solución de controversias contra Estados Unidos, ante la Organización Mundial de Comercio (OMC), por las medidas aplicadas a las exportaciones de acero y aluminio mexicano.
Fuente: La Razón