A nueve meses del sismo que sacudiera la Ciudad de México (19 de septiembre del 2017), padres, familiares y amigos de los diecinueve niños fallecidos a causa del derrumbe en el Colegio Enrique Rébsamen realizaron una ceremonia para recordar y honrar la memoria de sus hijos y exigir justicia.
La tarde de este martes, afuera del Colegio Enrique Rébsamen (que continúa en ruinas y mantiene sellos de la Procuraduría General de Justicia), ubicado en la calle de las Brujas colonia nueva Oriental Coapa, delegación Tlalpan, algunos de los familiares de los pequeños fallecidos repartieron rosas blancas, encendieron veladoras y colocaron dos mantas en donde exigen que se esclarezca el otorgamiento de licencias de operación cuando existían irregularidades evidentes.
Alejandro Jurado, padre de una de las pequeñas que falleció en el derrumbe, reiteró que la exigencia de justicia continuará y ellos no claudicarán para que las irregularidades en las licencias de construcción de los colegios privados en toda la Ciudad de México se revisen para evitar otro lamentable evento como el que hace nueve meses lo llenó de dolor y coraje.
Por su parte, Miriam Rodríguez Guíze, madre de otro pequeño que también pereció en el derrumbe de inmueble aquel 19 de septiembre, resumió en tres palabras lo que han sido estos nueve meses sin su hijo José Eduardo: <no vivo, sobrevivo>.
Fuente: Excélsior