El líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, reafirmó su voluntad de desnuclearizarse y celebrar una cumbre con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo hoy el presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in.
El líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, reafirmó su voluntad de desnuclearizarse y celebrar una cumbre con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo hoy el presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in.
“Los dos líderes acordamos que la cumbre entre Corea del Norte y Estados Unidos del 12 de junio debe celebrarse con éxito”, dijo Moon sobre su última reunión con el líder norcoreano, llevada a cabo por sorpresa la víspera.
Ambos también señalaron que su viaje “hacia la desnuclearización de la península coreana y el establecimiento de una paz permanente no pueden detenerse”, acordando cooperar hacia tal objetivo, añadió el presidente Moon en una conferencia de prensa en su oficina, Cheong Wa Dae.
Moon dijo que le explicó a Kim el resultado de su cumbre con Trump, celebrada la semana pasada, en la que el líder estadunidense se mostró dispuesto a poner fin a la hostil relación de su país con Corea del Norte y mejorar la cooperación económica, si Kim toma una decisión sobre la completa desnuclearización y la implementa, destacó la agencia Yonhap.
El presidente surcoreano añadió que, además, como Kim y Trump desean el éxito de la cumbre entre el Norte y Estados Unidos, hizó hincapié en la necesidad de que las dos partes eliminen cualquier malentendido a través de una comunicación directa y mantengan diálogos sobre temas de la agenda que deben abordarse en su cumbre, algo con lo que el líder norcoreano se mostró de acuerdo, enfatizó Moon.
Señaló que su reunión con el líder norcoreano podría ayudar a revivir la cumbre entre Kim y Trump, pero dijo que el destino de la histórica cumbre dependerá en gran medida del diálogo directo entre los dos países.
Lo que causó la disputa más reciente podrían haber sido las incertidumbres persistentes que Pyongyang sentía respecto con la garantía de seguridad de Estados Unidos, señaló Moon.
El líder surcoreano dijo que todos los esfuerzos que está haciendo ahora están destinados a mejorar la relación entre Corea del Sur y Corea del Norte por un lado, pero por otro lado, también están destinados a la celebración de la cumbre entre el Norte y Estados Unidos, “que es necesaria” para mejorar los lazos intercoreanos, apuntó.
El secretario presidencial de prensa de Corea del Sur, Yoon Young.chan, informó que esta segunda cumbre bilateral, tras la celebrada el 26 de abril pasado, tuvo una duración de dos horas y se llevó a cabo en el edificio Tongilgak, situado en el lado norte de la aldea de la tregua de Panmunjom.
La segunda reunión de Kim y Moon se mantuvo en absoluto secreto, y sólo se supo que por Corea del Sur participó el jefe del Servicio de Inteligencia Nacional, Suh Hoon, y por Corea del Norte el vicepresidente del comité central a cargo de los asuntos intercoreanos del gobernante Partido de los Trabajadores, Kim Yong-chol.
La cita de los líderes coreanos se dio luego que el jueves, el presidente estadunidense canceló la cumbre entre Pyongyang y Washington prevista para llevarse a cabo en Singapur el 12 de junio próximo, aunque al día siguiente, el propio Trump dijo que la realización del histórico encuentro era posible.
El mandatario estadunidense informó que Washington y Pyongyang mantienen conversaciones y que ambas partes quieren que la reunión se celebre en Singapur y se mantenga para el próximo 12 de junio, pero si es necesario se realizará más allá de esa fecha.
“Vemos que es una suerte que las brasas del diálogo entre Corea del Norte y Estados Unidos no se hayan extinguido por completo y estén cobrando vida nuevamente”, dijo Kim Eui-kyeom, portavoz del presidente surcoreano, en un comunicado.
“Estamos observando cuidadosamente los desarrollos”, añadió.
En tanto, Moon dijo que desearía celebrar una cumbre trilateral con Trump y Kim si la próxima cumbre bilateral entre estos tuviera éxito, añadiendo que le gustaría ver los esfuerzos para poner fin de manera oficial a la Guerra de Corea (1950-53).
Corea del Sur y Corea del Norte permanecen técnicamente en guerra dado que el conflicto bélico terminó solo con un armisticio, no con un tratado de paz.
Moon y Kim prometieron emprender esfuerzos conjuntos para reemplazar el armisticio coreano por un tratado de paz en su primera cumbre a finales del mes pasado.
Fuente: Staff