En el día de la libertad de prensa y ante concesionarios de radio y televisión, el presidente Enrique Peña Nieto manifestó su compromiso por salvaguardar el derecho a la libertad de expresión que ejerce la sociedad mexicana.
Al participar en la tradicional comida de la Cámara Nacional de la Industria de Radio y Televisión (CIRT) en el marco de la 59a Semana de la Radio y la Televisión, el mandatario destacó que como nunca antes los mexicanos hacen uso del derecho a disentir, a cuestionar y a opinar libremente.
El Gobierno de la República ha sido tolerante ante la crítica que proviene de una sociedad abierta y plural como la nuestra y no podía ser de otra manera.
“En una democracia la única postura política que no se puede tolerar es la intolerancia”, advirtió.
Este escenario de libertad, agregó el Jefe del Ejecutivo debe seguir presente porque es parte de la democracia.
“En México no hay lugar para la imposición frente a la diferencia ni la censura frente a la libertad. La libertad expresión, la libertad de prensa y la pluralidad de ideas son principios básicos de nuestra democracia”, subrayó.
Luego de hacer un recuento de los logros alcanzados durante su sexenio, como fueron las reformas estructurales, entre ellas la de telecomunicaciones que permitió la constitución de una nueva cadena de televisión abierta, el presidente Peña Nieto afirmó que México muestra un escenario propicio para invertir y a través del cual los empresarios han impulsado el crecimiento del empleo.
“Los empleos no se generan por decreto, no se generan a través del gasto fiscal o del gasto del gobierno, se generan a través de la puesta y de la iniciativa que tomen los propios mexicanos para invertir, para arriesgar y para construir un camino de éxito en la ruta que tomen contribuyendo al éxito de toda la nación”, apuntó.
Durante su mensaje, Peña Nieto resaltó la inversión extranjera directa que ha recibido nuestro país en lo que va de la administración que ya supera los 175 mil millones de dólares, por encima de los 156 mil millones que era la expectativa.
Fuente: Excélsior