La Fiscalía General de Veracruz ejecutó dos órdenes de aprehensión en contra del ex gobernador Javier Duarte de Ochoa, preso desde 2017.
Las órdenes de aprehensión son por abuso de autoridad, incumplimiento del deber legal, peculado, tráfico de influencias y coalición; delitos del fuero común.
La fiscalía informó que las dos órdenes de aprehensión fueron ejecutadas la noche del 14 de mayo.
“Los mandamientos judiciales fueron obtenidos por la fiscalía veracruzana en 2017, al presentar indicios de prueba suficientes que permitieron la emisión de las órdenes de aprehensión que fueron cumplidas con estricto apego al debido proceso, por lo que el ex gobernador fue notificado por el Juez de su situación jurídica, en el interior del Reclusorio Preventivo Varonil Norte, donde se encuentra internado, al enfrentar procesos penales de orden federal, por la probable autoría de los delitos de delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita”, indicó la FGE en un comunicado.
En seguimiento al proceso penal 38/2017, instruido por los delitos de incumplimiento del deber legal y tráfico de influencias y del proceso penal 56/2017, por los delitos de abuso de autoridad, incumplimiento del deber legal, peculado, tráfico de influencias y coalición, el juez de control establecerá la fecha próxima en la que se llevará a cabo la audiencia inicial, en la cual la autoridad ministerial formulará la solicitud de legalización de la detención, imputación e implementación de medidas cautelares.
A Javier Duarte de Ochoa se le imputan haber ocupado una aeronave propiedad del gobierno del estado, para realizar un asunto particular, el 14 de octubre de 2016, cuando ya no se encontraba en funciones como gobernador del estado y tras de lo cual huyó.
Al ex gobernador también se le imputa el haber emitido en 2014 una orden de transferencia de 220 millones de pesos que serían destinados a la Comisión del Agua del Estado de Veracruz (CAEV), los cuales instruyó que se transfirieran a una cuenta de la Secretaría de Finanzas y Planeación (SEFIPLAN), sin importar que eran recursos debidamente etiquetados para fines específicos distintos.
Fuente: Milenio