Los cambios en la dirigencia nacional del PRI son una señal de que «quieren recuperarse» de cara a la contienda presidencial que se disputará el próximo primero de julio en el país, consideró Andrés Manuel López Obrador.
Al confirmarse los cambios en la dirigencia tricolor, el candidato presidencial de la coalición Juntos Haremos Historia dijo que el PRI y su candidato José Antonio Meade están en su derecho de hacer los ajustes que consideren necesarios a fin que el ex secretario de Hacienda permanezca en la pelea electoral aun cuando las presiones para que decline por Ricardo Anaya, aspirante presidencial panista, se mantienen y hasta se ofrecen proposiciones «indecorosas».
«Tienen derecho a hacer los cambios que consideren, pienso que están tratando de recuperarse, quieren iniciar una etapa nueva y eso lo hacen los partidos, las organizaciones sociales, es una renovación, no lo veo mal», expresó López Obrador en una breve entrevista al término de un acto de campaña en Mante, Tamaulipas donde aseguró que nunca su movimiento terminará convirtiéndose en una dictadura.
López Obrador detalló que las presiones de los integrantes de la mafia del poder continúan sobre Meade, a pesar que se asegure que se trata de «una noticia falsa».
Estas presiones, puntualizó López Obrador, también se extienden al propio Ricardo Anaya.
«Que hagan su lucha todos y que, si pierden que pierdan con dignidad, que no se sometan, que no se vendan, que Anaya no decline por Meade, que llegue al final y que Meade no decline por Anaya, que se aguanten ahí, aunque los están presionando los de la mafia del poder, porque los van a ver, y les hacen proposiciones indecorosas «, subrayó.
Fuente: Excélsior