Un sismo de magnitud 5.3 se registró el jueves bajo el océano en el litoral sur de California y se sintió a lo largo de la costa del territorio continental, pero no se reportaron daños, a excepción de una chimenea en una de las Islas Channel.
El Servicio Geológico de Estados Unidos informó que el temblor, el más fuerte en los últimos 4 años, se registró a las 12:29 de la tarde en la región de las Islas Channel, también conocidas como Archipiélago del Norte, a 61 kilómetros (38 millas) al sudoeste de la ciudad de Ventura.
Unos ladrillos cayeron de la chimenea de una casa construida en la década de 1860 en la Isla Santa Cruz, pero nadie resultó lastimado, dijo la vocera del Parque Nacional Islas Channel, Yvonne Menard.
Los habitantes de ciudades cercanas como Los Ángeles pudieron sentir el temblor de manera leve, y medios locales informaron que «no se han registrado daños personales o materiales de consideración por este terremoto».
El sismo ocurrió a una profundidad de 16.8 kilómetros (10.5 millas) y el epicentro estuvo más cerca, a 27 kilómetros (17 millas), de la isla Santa Cruz, que forma parte del Parque Nacional Islas Channel.
La isla Santa Cruz está mayormente deshabitada, pero cuenta con una instalación de investigación, edificios históricos y zonas para acampar.
Científicos del centro de sismología del Instituto Tecnológico de California en Pasadena, al noreste de Los Ángeles, dijeron que el sistema de alerta emitió el aviso unos 10 segundos antes de que empezara a temblar.
«Sismos de esa magnitud por lo general se registran una vez al año en el sur de California», dijo Lucy Jones, sismóloga retirada que trabajaba para el Servicio Geológico.
California se encuentra en una zona de alta actividad sísmica atravesada, entre otras, por la falla de San Andrés.
Fuente: Excélsior