El América vivió su sábado de gloria, mientras Cruz Azul difícilmente tendrá su domingo de resurrección.
Las Águilas acarician la Liguilla porque tienen en Matheus Uribe y Cecilio Domínguez a jugadores que no se cansan de patentar golazos, porque cuando sufren en la retaguardia está Agustín Marchesín para salvarles el pellejo, porque hacen valer su jerarquía y más cuando tienen a La Máquina enfrente, como en el 2-1 en el Estadio Azteca que las colocó con 24 puntos.
Parece cuestión de tiempo para que Cruz Azul consume otro fracaso con sus 12 unidades porque ni Pedro Caixinha lo ha podido revivir, y menos si se encomienda a Carlos ‘Gullit’ Peña, sustituido tras el descanso, y a Martín Cauteruccio, quien perdió en el mano a mano y luego en un tiro de media distancia contra «Marche».
Pero si aun así los azulcremas son superados, pueden encomendarse a la mala suerte celeste como en el tiro de Martín Rodríguez directo al travesaño.
Fue un agarrón el que se presentó en el Azteca, pero con el final de siempre.
A las Águilas les gusta herir a los celestes, primero por lo psicológico. La Monumental desplegó una manta gigante con la leyenda «Nunca lo vas a superar», en alusión a la dramática Final del Clausura 2013, la que recordaron en los cánticos y hasta en bufandas.
Curiosamente, la portería de aquel drama cruzazulino esta vez se redimió con los azules porque ahí fue donde al 6′, Édgar Méndez clavó un golazo, al ángulo superior izquierdo y luego de una gran jugada en la que colaboraron Ángel Mena y Cauteruccio.
Sólo que el América hasta cuando no muestra su mejor nivel tiene a elementos capaces de cambiar la balanza, como ocurrió con Matheus que le pegó a la pelota como con un fierro al 24′.
Cruz Azul ya no pegaba en ese momento. América le armó una jugada en la que participaron Renato Ibarra, Paul Aguilar, Matheus, Henry Martín, Oribe Peralta y Cecilio, quien firmó la obra maestra.
El partido se prestó para un final dramático, con Julio Domínguez cerca del gol en un cabezazo y «Chuy» Corona jugando al ataque haciéndole al «Moy» Muñoz, pero el problema es que el portero juega en Cruz Azul, al que la suerte lo abandona cada que enfrente tiene al América.
La Máquina suma 12 puntos de 39 posibles, restan 12 unidades en 4 jornadas, por lo que no puede fallar y esperar resultados. Una combinación que luce muy complicada.
Fuente: Reforma