El empresario Nelson Vargas acusó que una serie de formulismos en el proceso contra los secuestradores de su hija, Silvia Vargas Escalera, podría dejar en libertad a los acusados.
A Óscar Ortiz González y Cándido Ortiz González, señalados como plagiarios de Silvia Vargas, se les repuso el proceso tras alegar una supuesta violación a sus derechos humanos al no contar con un defensor en las diligencias practicadas al momento de su detención, en 2008 y 2009, respectivamente.
En audiencia preparatoria efectuada ayer en el Juzgado Décimo Sexto de Distrito de Procesos Penales Federales de la Ciudad de México, los inculpados afirmaron que no contaron con un defensor al momento de declarar.
«Están pretendiendo que se apliquen criterios jurisprudenciales nuevos a diligencias practicadas hace años, cuando la ley adjetiva no exigía requisitos formales que ahora señala la jurisprudencia, como lo era el estar asistido por un defensor al momento de practicarse la confrontación», alertó Vargas en un comunicado.
Los hermanos son acusados de pertenecer a una banda de secuestradores conocida como «Los Rojos» y del plagio de Vargas Escalera, el 10 de septiembre de 2007.
Ambos figuran dentro de la causa penal 100/2015 y su acumulada 290/2015, instruida entre otros por el delito de secuestro.
No obstante, Vargas advirtió que un Juez Federal otorgó un amparo a estos sujetos, ya que al momento de rendir su declaración preparatoria se les nombró al mismo defensor, lo cual consideraron violatorio de sus derechos humanos.
A Oscar Ortiz González (ex chofer de Nelson Vargas) y Cándido Ortiz González se les dictó auto de formal prisión el 31 de julio de 2015, entre otros delitos, por el secuestro de Silvia Vargas.
El auto de formal prisión fue apelado y modificado por cuestiones formales por el Cuarto Tribunal Unitario en materia penal del primer Circuito, resolución que fue impugnada mediante Juicio de Amparo, el cual fue radicado ante el Segundo Tribunal Unitario, y se determinó conceder la protección federal a los acusados para efectos de que se repusiera el procedimiento.
En cumplimiento a dicho juicio de garantías, las autoridades responsables ordenaron que se dejara sin efectos todo lo actuado hasta la radicación de la causa 100/2015 y su acumulado, por lo cual el juzgado décimo sexto de Distrito de Procesos Penales Federales de esta ciudad, el 21 de marzo de 2018, decretó la detención legal y realizó las diligencias tendientes a que se les nombrara un defensor de manera individual al haber conflicto de intereses entre ellos.
El 23 de marzo se llevó a cabo la audiencia para las declaraciones preparatorias de los inculpados y este sábado dictarán el auto de término en el Juzgado 16 de Distrito de Procesos Penales Federales.
«Los hermanos Ortiz al rendir su declaración pretenden que se le otorgue su libertad bajo el argumento de que no tuvieron abogado cuando declararon ante el ministerio público, después de haber sido detenidos, y quieren que se les aplique el mismo criterio que se usó en otro asunto de uno de los integrantes de la banda, que fue puesto en libertad por ese hecho, aún y cuando hace años la ley no exigía dichos requisitos», insistió Vargas.
En 2016, un tribunal federal de Toluca liberó a Isidro Solís Medina, «El Chilo», presunto miembro de la banda de Los Rojos e implicado en el secuestro de Silvia Vargas, con base en «tecnicismos» aplicados en forma retroactiva.
A mediados de marzo de ese año, mientras caminaba por la Colonia Doctores, otra víctima se encontró en la calle a «El Chilo», a quien identifica como su plagiario y de quien sabía que fue sentenciado a 34 años con 6 meses de prisión por privarlo de la libertad.
Fuente: Reforma