La primera ministra británica, Theresa May, expresó hoy su «profunda preocupación» por la intención del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de imponer aranceles a las importaciones acero y aluminio en su país, informó la residencia oficial del 10 de Downing Street.
La primera ministra mencionó nuestra profunda preocupación por el anuncio del presidente sobre tarifas al acero y el aluminio, y mencionó que una acción multilateral es la única forma de resolver el problema del exceso de capacidad», notificó una portavoz de Downing Street sobre una llamada telefónica entre Trump y May este domingo.
El director de UK Steel, la asociación británica del sector siderúrgico, Richard Warren, advirtió el viernes de que el alza de los aranceles puede tener «impacto» en la economía del Reino Unido.
Trump anunció hace unos días su intención de imponer aranceles del 25 % sobre las importaciones de acero y del 10 % sobre las de aluminio, lo que causó preocupación en la comunidad internacional.
Según Trump, la producción estadunidense del metal se ha visto «diezmada» por políticas «injustas» de comercio, y Estados Unidos no puede permitir que el resto del mundo «siga aprovechándose».
Según datos del Gobierno británico, la industria del acero generó mil 600 millones de libras (unos mil 796 millones de euros) el pasado 2016, lo que representa un 0.1 % de la economía del Reino Unido.
Tras su salida de la Unión Europea, prevista para el 29 de marzo de 2019, Reino Unido podrá firmar acuerdos comerciales con otros países, entre ellos Estados Unidos.
May fue la primera dirigente extranjera en visitar al presidente estadounidense, pero desde entonces la «relación especial» entre ambos países se ha visto empañada por varios episodios tensos, y un viaje previsto del presidente estadounidense a Londres fue aplazado.
Fuente: Excélsior