¿Recuerdan el año pasado, cuando los expertos en los Oscar estaban seguros de que este premio iba a ser para La La Land y tuvieron la razón, hasta que el embrollo con el sobre comprobó que habían estado muy pero muy equivocados? Pues esa debería ser suficiente advertencia para tomar en cuenta cualquier pronóstico.
Este año parece haber un empate en las predicciones, entre La forma del agua, que tiene la mayor cantidad de nominaciones y ha ganado varios premios precursores, y Tres anuncios por un crimen, que también ganó algunos premios que sirven como barómetro. Es probable que la película que gane lo haga por poco –aunque nunca sabremos por cuánto, porque la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas no da a conocer los conteos de votos–.
Tres anuncios… ha desatado controversias por tomar los temas raciales con cierta ligereza y muestra un retrato poco halagador de Estados Unidos. Por otro lado, es protagonizada por la potente Frances McDormand, quien interpreta a una madre guerrera perfecta para este momento del #MeToo y es acompañada por magníficas actuaciones de reparto. La forma del agua es un elegante cuento de hadas de Guillermo del Toro y una parábola sobre la tolerancia, la crueldad y… el sexo entre especies; también le rinde culto al cine, algo que los miembros de la academia usualmente celebran. Sin embargo, no le fue muy bien con el Sindicato de Actores (SAG), mientras que Tres anuncios… sí triunfó entre ese grupo; los actores son el bloque de votantes más grande de la academia. Por otro lado, La forma… ha sido menos divisoria y, a diferencia de Tres anuncios…, fue nominada también a mejor director.
Hay algo de probabilidad de que gane ¡Huye!, que fue favorita del público, pero es una probabilidad baja pues solo obtuvo cuatro nominaciones en total. Así que lancemos una moneda: predigo que ganará La forma del agua.
Mejor actriz
Una de las preguntas que más le hizo la prensa a los coprotagonistas de Frances McDormand en Tres anuncios por un crimen es si fue intimidante trabajar con ella (Sam Rockwell dijo que no; Caleb Landry dijo que sí). En su interpretación de Mildred, una madre cuyo pesar por el asesinato irresuelto de su hija la endurece y llena de venganza e ira, McDormand es temeraria y no da tregua; es tan imponente como cualquier mujer podría querer serlo en esta era de #MeToo.
En otro año cualquiera de las otras nominadas —Sally Hawkins, Margot Robbie, Saoirse Ronan o Meryl Streep— podrían haberle dado más competencia, pero en esta ocasión quien más representa el momento es una mujer en sus sesenta que no tiene por qué soportar a ningún imbécil.
Mejor actor
Gary Oldman, de 59 años, es de esos actores celebrado hasta por sus pares debido a su versatilidad y la manera en la que se mete de lleno —a veces exageradamente— en papeles como Dracula, Beethoven, Sid Vicious, el diablo, Lee Harvey Oswald, Rosencrantz y el comisionado Gordon. Oldman obtuvo su primera nominación al Oscar en 2012 por Tinker Tailor Soldier Spy, pero es su interpretación de Winston Churchill en Las horas más oscuras la que seguramente le dará el triunfo.
Los ingredientes básicos están ahí: se trata de una figura histórica (con una actuación ayudada por prótesis y mucho maquillaje), ha ganado los premios previos y se enfrenta a dos jóvenes (Timothée Chalamet y Daniel Kaluuya) a los que les quedan años de carrera y a dos veteranos (Daniel Day-Lewis y Denzel Washington) que ya han ganado varias veces.
Actriz de reparto
En esta categoría hay varias estrellas con mucha experiencia —Lesley Manville, Laurie Metcalf, Octavia Spencer y, en una actuación reveladora, la cantautora Mary J. Blige— y todas interpretan a personajes indomables. Pero la actuación impávida de Allison Janney como LaVona Golden, madre de la patinadora artística que cayó en desgracia Tonya Harding, es la que le ha dado premio tras premio a la actriz ya ganadora de varios Emmy. Janney, quien usualmente aparece como alguien empática, sabia y cariñosa, es sumamente mordaz y cruel como LaVona y logra sobresalir incluso cuando un ave la picotea durante una escena hilarante de la película Yo, Tonya.
Actor de reparto
Sam Rockwell a sus 49 años es el más joven de los nominados para este premio en esta ocasión, que van desde Christopher Plummer, de 88 años, a Willem Dafoe, Richard Jenkins y Woody Harrelson. Este último aparece también en Tres anuncios por un crimen como el jefe de policía al lado del oficial idiota y racista Jason Dixon, interpretado por Rockwell. Él es un experto en interpretar a hombres impredecibles y alocados y, dado que Dixon pasa por una transformación —a los votantes de la academia les encaaaaaanta eso– puede mostrar así su rango actoral.
Ya tiene en su colección un Globo de Oro, un premio SAG y un Bafta, y su éxito en el Oscar está prácticamente garantizado.
Mejor director
Aunque varios fanáticos de Guillermo del Toro no consideran que La forma del agua sea su mejor película —varios la ponen por debajo de El espinazo del diablo y El laberinto del fauno–, esta tiene todo el ímpetu. La forma… encabeza las nominaciones, con trece, y Martin McDonagh, el director del principal filme rival en la categoría de mejor película (Tres anuncios por un crimen) no fue nominado.
Del Toro es muy respetado y le cae bien a muchos; además, impulsado por un sentir de que “este es su momento”, ya ganó en los Globos de Oro, el Sindicato de Directores y los Bafta. Si consigue esta estatuilla será la cuarta vez en cinco años que un mexicano se hace con este premio.
Mejor documental
Hasta que fueron anunciadas las nominaciones los pronosticadores habían apostado por el documental Jane, sobre la conservacionista y primatóloga Jane Goodall. En cambio, la academia nominó a filmes menos alegres que tratan el racismo endémico en sociedades (Strong Island), el día a día de los rescatistas y médicos civiles en el conflicto sirio (Last Men in Aleppo), el dopaje institucional ruso (Icarus) y un presunto fraude bancario (Abacus: Small Enough to Jail).
Visages Villages destaca por ser divertida y poco convencional, al unir al artista francés de 35 años JR, que pone las imágenes de personas cualesquiera en torres de agua, en favelas y en edificios alrededor del mundo, con Agnès Varda, ahora de 89 años, cineasta que ha sido llamada la abuela del movimiento new wave. El resultado es una película tierna, agridulce y muy idiosincrásica que tiene las de ganar.
Mejor guion original
De todas las películas en la categoría, sin duda ¡Huye! es la que tuvo un impacto más generalizado dado su mensaje (sí, las personas blancas que se dicen liberales también tienen algo de racistas), su éxito en taquilla (255 millones de dólares en todo el mundo a partir de un presupuesto de 4,5 millones) y cuatro nominaciones, incluidas mejor película, actor y director; todo esto es algo impresionante para un filme provocador de terror-comedia.
Es una apuesta incierta para mejor película y tiene pocas probabilidades en las otras dos categorías, pero los miembros de la academia que quieren premiarla con algo seguramente le darán a Jordan Peele, el guionista y director, esta estatuilla. Es posible que terminen ganando Lady Bird o Tres anuncios por un crimen, pero ¡Huye! tiene la ventaja indudable después de haber triunfado en la premiación del Sindicato de Guionistas de Estados Unidos.
Mejor guion adaptado
James Ivory sería el favorito afectivo en esta categoría incluso si no hubiera ganado el premio del sindicato por adaptar la novela de André Aciman Llámame por tu nombre. Como parte del dúo Merchant-Ivory, ya ayudó a adaptar trabajos gloriosos como A room with a view, Howard’s End y Los restos del día.
Este año la categoría tiene algo inusual, pues incluye por primera vez una película de superhéroes, Logan, pero de cualquier modo se espera que Ivory, de 89 años y quien ha sido nominado en tres otras ocasiones, se lleve el Oscar.
Mejor película animada
Es muy muy muy difícil vencer a Pixar. La productora ha ganado nueve premios Oscar en la última década, seis de ellos por películas animadas como Wall-E, Up e Intensa-mente. Los elementos visuales de sus filmes te dejan sin aliento, las tramas hacen llorar hasta a los adultos y Coco, sobre un joven mexicano que tiene una misión vinculada al Día de Muertos, no es la excepción. Además, enaltece a México en momentos en que ese país ha sido muy vilipendiado por algunos en Estados Unidos.
La categoría también incluye a filmes pequeños como The Breadwinner, del estudio irlandés Cartoon Saloon y que cuenta a Angelina Jolie como una de las productoras ejecutivas, y la taquillera Un jefe en pañales. No obstante, lo más seguro es que triunfe Coco.
Mejor película extranjera
Varios amantes del cine consideran que Daniela Vega, la protagonista de Una mujer fantástica, de Chile, debería incluso haber sido nominada por su actuación como Marina, cantante de bar y mesera cuya vida es puesta en jaque cuando su novio muere repentinamente. Vega, quien tiene entrenamiento clásico como cantante de ópera, interpreta a Marina con una fortaleza certera aunque silenciosa y una gracia que la impulsan por encima del vituperio y los estereotipos crueles a los que la someten la familia de su pareja y los funcionarios locales.
Esta película chilena es la favorita en la categoría, además de que ya puede decir que tuvo un triunfo: Vega será una de las presentadoras durante la ceremonia, lo que la convierte en la primera persona abiertamente transgénero en anunciar un Oscar.
Fuente: NYTimes