El escritor peruano Mario Vargas Llosa dedicó su columna dominical “Nuevas Inquisiciones” en el diario El País para escribir sobre los “sectores más radicalizados del feminismo”, afirmando que son “el enemigo más resuelto de la literatura”.
El ganador del Nobel aseguró que lo que más “desmoralizado” lo tiene, incluso más que la posibilidad de “una guerra nuclear que extinga a buena parte de los bípedos de este planeta”, es que la literatura pueda desaparecer a causa del feminismo.
Señaló que la literatura siempre ha tenido “enemigos” y que, así como en el pasado fue sometida a censuras por la religión y los gobiernos totalitarios, ahora encuentra en el feminismo a su más grande peligro.
“Ahora el más resuelto enemigo de la literatura, que pretende descontaminarla de machismo, prejuicios múltiples e inmoralidades, es el feminismo. No todas las feministas, desde luego, pero sí las más radicales, y tras ellas, amplios sectores que, paralizados por el temor de ser considerados reaccionarios, ultras y falócratas, apoyan abiertamente esta ofensiva antiliteraria y anticultural”, asegura.
El autor de La fiesta del Chivo asegura que, “por temor”, nadie ha criticado en España el “decálogo feminista” de sindicalistas que pide eliminar en las clases escolares a autores como Pablo Neruda, Javier Marías y Arturo Pérez-Reverte.
Finalmente, destacó que, gracias a la libertad de que ha gozado en ciertos períodos y en ciertas sociedades, existe la gran literatura.
“Quienes se empeñan en que la literatura se vuelva inofensiva, trabajan en verdad por volver la vida invivible, un territorio donde, según Bataille, los demonios terminarían exterminando a los ángeles. ¿Eso queremos?”, concluye.
Fuente: La Razón