La cuaresma, que este año inició el 14 de febrero y termina el 29 de marzo, es tradicionalmente la temporada del año en que los mexicanos reducen el consumo de carne roja y elevan el de enlatados de atún y sardinas, lo que incide en su encarecimiento.

Esto es aprovechado por jugadores como Grupomar, que maneja marcas de atún como Tuny, así como Grupo Pinsa, dueña de Atún Dolores, que vieron duplicar el valor del mercado en la última década y dispararse en 46 por ciento los ingresos de la industria en un lustro.

La tendencia hacia la comida saludable y el incremento de precios y mayores inversiones, explican la expansión del sector.

Expertos explicaron que la tendencia hacia la comida saludable, el fuerte incremento de precios y mayores inversiones de las empresas para hacer frente a una demanda creciente, explican la expansión del sector.

Según el Inegi en 2017 el precio de los atunes y sardinas enlatadas aumentó 13.6 por ciento respecto al año previo, por encima de la inflación general de 6.8 por ciento.

Esto permitió que la industria de enlatados de atún y sardinas registrara ventas de 10 mil 100 millones de pesos el año pasado, 46 por ciento más que en 2012 y 103 por ciento arriba de las obtenidas en 2007, de acuerdo con la misma fuente.

Antonio Guerra, director general de Grupomar, aseveró que además de los precios, otro factor que incidió en la expansión del sector es la cuaresma, temporada que representa el mayor porcentaje de sus ventas anuales y que en 2017 finalizaron en 4 mil millones de pesos, 15 por ciento más que un año antes.

“Los primeros cuatro meses representan cerca del 40 por ciento de las ventas del año”, detalló.

Aunque Grupomar exporta a varios países de Latinoamérica y Norteamérica el valor de sus envíos significó apenas 2 por ciento de sus ventas totales.

“En el extranjero estamos haciendo cerca de 70 millones de pesos, lo que representa como el 2 por ciento (del total de ingresos)”, detalló el director general de Grupomar.

Actualmente, la firma tiene dos plantas en el país, una en Manzanillo, Colima, y otra en Ensenada, Baja California. Ambas producen 60 mil toneladas de atún y sardina al año, lo que equivale a más de un millón 600 mil latas diarias.

Para este año la empresa proyecta un aumento de 33 por ciento en su producción total.

“Este año, entre el atún y la sardina, esperamos llegar a las 80 mil toneladas de materia prima” afirmó Guerra.

Además, ante el creciente auge de la comida saludable, Grupomar ha hecho campañas publicitarias de la mano de chefs reconocidos en el país.

Por otro lado, Alfonso Vázquez, director general de Pinsa Comercial, dijo que la empresa planea un par de lanzamientos que se acoplan a las nuevas tendencias de comida fuera de casa.

“Tenemos un par de lanzamientos: atún en salsa verde y atún en salsa de 3 chiles, en una presentación en sobre de 200 gramos listos para comer en frío o caliente” detalló Vázquez.

En los últimos tres años, Pinsa invirtió más de 300 millones de dólares en nuevas plantas y en la compra de barcos, entre otros activos.

De acuerdo con datos de Euromonitor International, al finalizar 2017 Pinsa lideraba el mercado de enlatados de atún y sardina en México con una participación de 37.6 por ciento, seguido de Grupomar y Herdez, con 19.7 y 8.3 por ciento, respectivamente.

El resto se distribuye entre otros jugadores. (El Financiero)