Jared Kushner habría dado un pequeño paso en la dirección correcta en la relación con México, según el New York Times.
El Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no hizo ninguna mención sobre el pago exigido al País por el muro fronterizo, supuestamente a petición directa de su yerno, según fuentes citadas por el diario The New York Times.
Además, fue Kushner quien presionó a Trump para excluir a México de los nuevos aranceles de EU al acero y aluminio e incluirlos en la renegociación del Tratado de Libre Comercio (TLC).
La influencia de Kushner como asesor en la Casa Blanca ha sido duramente cuestionada por decisiones que el Mandatario ha tomado en el pasado.
Sin embargo, el tema de la relación con México es distinto.
El Times asegura que personas que trabajan junto a Kushner, así como aliados y funcionarios del Gobierno mexicano califican que «el trabajo tras bambalinas» con México para preservar la relación ya tiene éxito.
Y es que los enfrentamientos de Trump con el Presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, han provocado en el pasado la cancelación de dos reuniones en Washington.
La próxima semana, durante la visita a México de la Secretaria de Seguridad Nacional de EU, Kirstjen Nielsen, se buscará que ambos países firmen dos acuerdos de cooperación fronteriza.
Los acuerdos, según el diario, busca que los países creen inspecciones conjuntas para detener el flujo de drogas y otros objetos de contrabando a través de la frontera.
Asimismo, el segundo acuerdo buscaría utilizar tecnología para acelerar inspecciones de carga ilegal.
Funcionarios de la Casa Blanca también anunciaron que en las próximas semanas se conocerán más acuerdos sobre cooperación energética, infraestructura y desarrollo económico con países centroamericanos, con el objetivo de frenar el flujo de migrantes, a través de México, hacia EU.
«Nuestro diálogo no se limita a la Casa Blanca. Sin embargo, si no tuviéramos ese diálogo con el señor Kushner, la relación sería mucho peor», aseguró Gerónimo Gutiérrez, Embajador de México en Washington.
En las últimas semanas, Kushner ha experimentado una difícil situación en la Casa Blanca.
Despojado de sus permisos de seguridad de alto nivel y enfrentado a una hostil situación por su plan de paz con Medio Oriente, el asesor ha buscado avanzar en la relación México-EU, mermada por los desacuerdos entre sus Mandatarios.
Pero el trabajo de Kushner, en apoyo del Canciller mexicano, Luis Videgaray, ha servido para mantener una comunicación positiva entre los Gobiernos.
Sin embargo, los analistas estiman que con las elecciones mexicanas en puerta y las legislativas estadounidenses en otoño podrían llevar a Trump a revivir el lenguaje despectivo hacia México estropeando la «misión de rescate» de su yerno.