Fiscales demandaron hoy al Tribunal del Distrito Central de Seúl una condena de 30 años de prisión contra la expresidenta de Corea del Sur, Park Geun-hye, por su papel en el escándalo de corrupción que le costó el cargo el año pasado.
La Fiscalía pidió también a la corte que ordene el pago de una multa superior a los 110 millones de dólares a la destituida mandataria, quien fue acusada en abril del año pasado de 18 cargos de corrupción, incluidos sobornos, abuso de poder y revelación de secretos de Estado.
Los cargos le fueron imputados después de que su amiga Choi Soon-il fue detenida por acusaciones de tráfico de influencias y sobornos, acciones que habrían tenido el aval de Park, quien fue destituida en medio del escándalo en marzo de 2017.
La expresidenta, de 66 años de edad, fue acusada de confabularse con su amiga Choi para extorsionar a grandes conglomerados surcoreanos, entre ellos Samsung, Lotte y SK, a cambio de favores empresariales.
Además, Park habría permitido a Choi entrometerse en asuntos de Estado a pesar de que no tenía autoridad oficial ni cargos en el gobierno.
La Fiscalía dijo que la depuesta mandataria privatizó la autoridad presidencial para vender influencias y ensuciar los valores constitucionales, de acuerdo con despachos de la agencia surcoreana de noticias Yonhap.
“Como resultado de eso, la acusada se convirtió en el primer líder del país democráticamente elegido en ser removido de su cargo”, sostuvieron los fiscales y agregaron que “eso ha dejado una mancha imborrable en la historia de Corea del Sur”.
Aunque Park se ha declarado inocente de los cargos que se le imputan, los fiscales destacaron en su petición la falta de sinceridad de la expresidenta en el transcurso del juicio, ya que ella se negó a asistir a una audiencia después de que el tribunal extendió su detención en octubre pasado.
De hecho, la destituida mandataria tampoco apareció en la audiencia de este martes, la última antes de que el tribunal emita su fallo, lo cual se prevé que tendrá lugar el próximo 6 de abril.
“No solo ha insistido en negar los cargos, sino que también engañó al público acerca de la verdad del tráfico de influencias al acusar a este caso de ser una recompensa política”, sostuvo la Fiscalía al resaltar la necesidad de que Park reciba un “fuerte castigo”.
Fuente: Crónica