Estados Unidos considera la posibilidad de sanciones a las exportaciones petroleras de Venezuela, pero toma en cuenta el impacto que esas medidas tendrían sobre la población, dijo el secretario de Estado Rex Tillerson este domingo en Buenos Aires.
«La situación en Venezuela empeora. Uno de los aspectos a tomar en cuenta en caso de adoptar sanciones petroleras son los efectos que tendría sobre la población y si ese sería un paso que ayude a llegar al final, a acelerar el final», dijo Tillerson en una rueda de prensa junto con su homólogo argentino Jorge Faurie.
«Porque no hacer nada es también pedirle al pueblo de Venezuela que siga sufriendo durante mucho más tiempo», añadió.
El secretario de Estado, que cumple una gira latinoamericana que ya lo llevó a México, ha expresado su preocupación por lo que califica de «crisis humanitaria» en Venezuela y ha llamado a que se realicen elecciones «libres y justas».
Estados Unidos ha aplicado hasta ahora sanciones individuales a los más altos cargos del gobierno de Nicolás Maduro y también prohibió transar bonos soberanos y de la petrolera estatal PDVSA.
Tillerson trató con Faurie «el tema de Venezuela extensamente, incluyendo qué pasos pueden darse para aumentar la presión sobre el régimen de Maduro», dijo.
«Que (Venezuela) regrese a la Constitución y que haya elecciones libres, justas y verificables es nuestro único objetivo», afirmó.
La Asamblea Nacional Constituyente de Venezuela, en la que no hay representación de la oposición política, adelantó para antes del 30 de abril las elecciones presidenciales.
En esos comicios, en los que Maduro buscará la reelección, no podrá participar la coalición Mesa de la Unidad Democrática ni varios partidos opositores que no pudieron revalidar su registro ante la autoridad electoral.
Fuente: La Jornada