El Grupo de Lima, conformado por 14 países, exigió este martes al gobierno de Venezuela que cambie el calendario electoral y que permita abrir un «corredor humanitario» para enfrentar el desabastecimiento de alimentos, tras una reunión de cancilleres que rechazó a la convocatoria a comicios anticipados en ese país.
Además, Perú pidió al presidente venezolano Nicolás Maduro que desista de concurrir a la Cumbre de las Américas en Lima en abril, afirmando que su presencia «no será bienvenida en dicho encuentro».
Los 14 países del grupo «exhortan al gobierno de Venezuela a que reconsidere la convocatoria de las elecciones presidenciales y presente un nuevo calendario electoral», dijo el grupo al término de un cónclave de casi siete horas en Lima, en una declaración conjunta leída por la canciller anfitriona, Cayetana Aljovín.
«No puede haber elecciones libres y justas con presos políticos, sin la plena participación de los partidos políticos y líderes detenidos o inhabilitados arbitrariamente», indica la declaración.
«Corredor humanitario»
Los 14 países también «exhortan al gobierno de Venezuela a que permita sin demora la apertura de un corredor humanitario que ayude a mitigar los graves efectos del desabastecimiento de alimentos y medicinas», dice el texto.
«Frente al incremento del éxodo de miles de venezolanos que huyen de la grave crisis que se vive en ese país, (los cancilleres del grupo) acuerdan coordinar esfuerzos para afrontar de una manera ordenada, solidaria y segura esa situación», añade.
La canciller colombiana María Ángela Holguín dijo que la comunidad internacional está lista para «apoyar un canal humanitario» para Venezuela. Además, negó que Bogotá planee una intervención militar en el país vecino, como han afirmado funcionarios venezolanos.
«Tenemos suficientes problemas en Colombia (…), para pensar en una intervención militar en Venezuela. Jamás lo hemos pensado», expresó Holguín.
Por su parte, la canciller de Canadá, Chrystia Freeland, dijo que desde la reunión del grupo en Santiago el 23 de enero «la crisis en Venezuela ha empeorado».
La situación en Venezuela ha estado marcada por una aguda pugna entre el gobierno chavista de Nicolás Maduro y la oposición desde que ésta ganó el control del Congreso en diciembre de 2015.
Maduro, elegido por estrecho margen hace cinco años tras el deceso del mandatario Hugo Chávez (1999-2013), aspira a ser reelegido en los comicios de abril, convocados luego del fracaso de una negociación entre su gobierno y la oposición para acordar las condiciones del proceso.
La oposición venezolana, agrupada en la Mesa de Unidad Democrática (MUD), aún no ha decidido si participará en los comicios, que fueron adelantados por decisión de la oficialista Asamblea Constituyente que impulsó Maduro en respuesta a las protestas de 2017 y que rige en el país como poder absoluto.
Petición de la ex fiscal general
Los cancilleres también tomaron nota de una comunicación de la destituida fiscal general venezolana, Luisa Ortega, una chavista devenida en crítica de Maduro y ahora exiliada.
Ortega puso a disposición del Grupo de Lima las pruebas que acompañaron su denuncia ante la Corte Penal Internacional para que soliciten «una investigación formal por crímenes de lesa humanidad en Venezuela» en el marco de las protestas de 2017, que culminaron con al menos 125 muertos.
El gobierno de Maduro y la oposición, que denunció una «salvaje represión» de militares y policías, se responsabilizaron mutuamente por la violencia.
Gira de Tillerson
El 23 de enero, el Grupo de Lima había rechazado la decisión unilateral de la oficialista Asamblea Constituyente venezolana, que rige con plenos poderes, de adelantar los comicios, que generalmente se efectuaban a finales de año.
El adelanto de los comicios también fue condenado por Washington. El jefe de la diplomacia estadunidense, Rex Tillerson, efectuó la semana pasada una gira por América Latina que estuvo dedicada en buena medida a la situación venezolana.
En su visita a Perú, Tillerson elogió las gestiones del Grupo de Lima en la búsqueda de una salida a la crisis en Venezuela.
Informe de la CIDH
Los cancilleres también analizaron un informe sobre Venezuela presentado el lunes en Washington por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que expresó su «profunda preocupación» por la «respuesta represiva, arbitraria y contraria a derechos humanos» del gobierno a la oleada de movilizaciones en su contra.
Surgido en agosto de 2017 para abordar la crisis venezolana, el Grupo de Lima fue creado por Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Paraguay y Perú.
Originalmente de 12 países, el grupo ahora tiene 14 miembros, tras las adhesiones de Santa Lucía y Guyana. En la cita de este martes también participó por videoconferencia la vicecanciller de Jamaica, Marcia Gilbert Roberts, aunque su país no integra formalmente el grupo.
Fuente: Milenio