No siempre los que terminan en los primeros lugares en los Juegos Olímpicos son los que se llevan el reconocimiento del público.
Este viernes, el mexicano Germán Madrazo, de 43 años, quien aprendió a esquiar tan solo un año antes, terminó en la última posición (116) de la competencia de esquí de fondo en los Juegos Olímpicos de invierno de Pyeongchang, Corea del Sur, pero el deportista se llevó el reconocimiento del público y de sus rivales.
En los últimos metros antes de cruzar la meta, a Madrazo le dieron una bandera de México. Él se emocionó mucho y cruzó la línea final portando muy orgulloso la bandera de su país.
Sus rivales, incluyendo al esquiador de Togo, Pita Taufatofua, y el colombiano Sebastian Uprimny, le dieron la bienvenida a Madrazo y lo levantaron en hombros.
Germán Madrazo, uno de los cuatro mexicanos que compiten en Pyeongchang, fue un motivo de orgullo en la competencia de esquí de fondo y para muchos es símbolo de lo que significan los Juegos Olímpicos.
El esquiador suizo Dario Cologna conquistó la medalla de oro este viernes en los 15 kilómetros estilo libre con un tiempo de 33:43.9, logrando su tercer título consecutivo en la disciplina y su cuarto oro en total.
En segundo y tercer lugar quedaron el noruego, Simen Hegstad Krueger (18.3), y el ruso, Denis Spitsov (23), respectivamente.
Fuente: Huffingtonpost