El senador Miguel Barbosa Huerta declaró que nadie le cree al precandidato presidencial José Antonio Meade cuando presenta sus iniciativas para terminar con la corrupción.
“Tiene las manos atadas para actuar en contra de los corruptos, todos sabemos que el gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto, el PRI y sus representantes en el Congreso de la Unión nunca se comprometieron realmente con el combate a este delito”, declaró.
Dijo además que está perfectamente documentado en dónde estuvieron las mayores resistencias para que el paquete de reformas en materia constitucional y legal avanzara; están perfectamente documentados los intentos por boicotear la creación, funcionamiento y financiamiento del Sistema Nacional Anticorrupción, así como las pretensiones de imponer a los magistrados anticorrupción a modo”, señaló.
Barbosa Huerta dijo que el combate a la corrupción es uno de los grandes pendientes de la agenda nacional y el castigo a los corruptos una de las demandas más sentidas de la sociedad.
“Lo importante es que la sociedad tiene claro que la única opción que puede combatir realmente a la corrupción la representan Andrés Manuel López Obrador y Morena, por una razón muy sencilla y que la sociedad la tiene perfectamente clara: no forman parte del pacto de impunidad”
El vicecoordinador político del grupo parlamentario PT-Morena en el Senado de la República dijo que es falso que el precandidato del PRI a la Presidencia “pueda cruzar el pantano de dos sexenios, uno panista y otro priista, sin mancharse el plumaje”, pues más allá de sus cualidades personales, ha guardado silencio ante los actos de corrupción que se han hecho públicos dentro y fuera del país.
“Nadie cree que José Antonio Meade irá a fondo contra César Duarte, Javier Duarte, Roberto Borge, Roberto Sandoval y demás gobernadores priistas y de todos los partidos políticos que tuvieron la protección del gobierno para actuar con total impunidad, para enriquecerse y enriquecer a sus familiares, socios y amigos, y para desviar miles de millones de pesos a las campañas de sus partidos políticos”, aseguró.
Insistió en que, independientemente de las propuestas que José Antonio Meade presente, en realidad tiene las manos atadas para actuar contra los corruptos. Si sus deseos fueran auténticos, no lo dejarían hacer nada, y en buena medida fue elegido como precandidato por esa imagen de servidor público decente en medio de políticos corruptos.
El senador poblano indicó que Meade Kuribreña y su equipo saben que queda poco tiempo para mostrarse como un candidato competitivo y conservar el respaldo pleno de la oligarquía y del gobierno de Estados Unidos, que fueron los que realmente palomearon su candidatura.
Fuente: La Razón