Desde este fin de semana se puede disfrutar en las salas de cine mexicanas de la más reciente película del director Guillermo del Toro, La Forma del Agua, una de las grandes favoritas en esta temporada de premios.
Ganadora del León de Oro en el Festival de Venecia del año pasado, Guillermo del Toro afirmó que dicha película es su trabajo más personal con el cual no se desprende de su esencia fantástica que lo caracteriza.
“Vivimos en un mundo en el que le tenemos miedo al otro, quién es el otro, el otro simplemente existe, pero por ideología, y eso genera violencia y separación”, dijo el cineasta sobre La Forma del Agua.
Tras ganar el Globo de Oro al Mejor Director por La Forma del Agua, la película se perfila como una de las favoritas para los 90° Premios Oscar, que incluso adentra dentro de un tema musical que explora el hambre del cine y la cotidianidad de un monstruo, lo que permite que converja el amor físico sin ningún problema.
“Es ahí donde encuentra la relación directa entre lo fantástico y lo surrealista”, apuntó. “También hablo del amor romántico y no del de novela, porque no todo acaba con la boda sino ahí es donde empieza. Al final es una declaración de amor al cine, al amor en general, al cine dominguero que te salva la vida a veces, que te saca, que te da vida y oxígeno”, añadió.
Ambientada en la época de la Guerra Fría en Estados Unidos, la trama da cuenta cómo en un laboratorio oculto de alta seguridad del gobierno, se encuentra en cautiverio un ser fantástico, un experimento secreto de dos patas, una cola y dos brazos, que es descubierto por la solitaria Elisa, papel de Sally Hawkins.
“Quería crear una historia bella y elegante acerca de la esperanza y la redención, como un antídoto ante el cinismo de nuestros tiempos. Quería que esta historia cobrara la forma de un cuento de hadas, en cuanto a que tienes un ser humano humilde que se topa con algo más grande y trascendental que cualquier cosa en su vida”.
#EnContexto ¿Por qué debes ver “La forma del agua” de Guillermo del Toro?