Cuba anunció hoy la convocatoria para el 11 de marzo de las elecciones generales en las que se votará a los diputados de la nueva Asamblea Nacional (parlamento unicameral), encargados de elegir en abril los principales cargos del próximo gobierno y al sucesor de Raúl Castro en la presidencia del país.
El mismo día tendrán lugar también los comicios a nivel provincial, en los que se votará a los delegados a las Asambleas provinciales del Poder Popular (parlamentos regionales), según anunció hoy el Consejo de Estado en una nota oficial publicada en el diario estatal Granma.
El Consejo de Estado también fijó para el 21 de enero la reunión extraordinaria en las Asambleas municipales del Poder Popular (ente semejante a un Ayuntamiento) para que nominen entre sus delegados (concejales) a los candidatos a delegados provinciales y a diputados nacionales.
Desde ayer y hasta el 14 de enero, los 12.515 concejales elegidos en los comicios municipales del pasado 26 de noviembre serán consultados sobre las propuestas de «precandidatos» a delegados provinciales y diputados por sus respectivos territorios, unas listas que han sido elaboradas por las comisiones de candidaturas.
En las listas hay propuestos 12.640 potenciales candidatos que fueron, a su vez, seleccionados en reuniones de las organizaciones de masas del país, todas oficialistas.
La Ley Electoral cubana establece que hasta el 50 por ciento de los diputados nacionales pueden ser elegidos de entre los delegados municipales y provinciales, mientras que el resto los proponen las organizaciones sociales.
La fecha de inicio de la nueva legislatura estaba prevista para el 24 de febrero, pero en diciembre pasado el Parlamento, a propuesta del Consejo de Estado, aprobó alargar dos meses el actual mandato por los atrasos en el calendario electoral causados por el feroz paso del huracán ‘Irma’ en septiembre, que dejó pérdidas por más de 13.000 millones de dólares.
El nuevo Parlamento se conformará el 19 de abril y será el encargado de proponer y votar a los principales cargos del gobierno del país, entre ellos el Presidente y Vicepresidente; una cita que provoca gran expectación porque por primera vez en seis décadas el gobernante de la isla no llevará el apellido Castro.
«Cuando la Asamblea Nacional se constituya habré concluido mi segundo y último mandato al frente del Estado y del Gobierno, y Cuba tendrá un nuevo Presidente», aseguró el propio Castro ante la Asamblea Nacional el pasado 21 de diciembre, en su último pleno del año.
Aunque no se ha producido una confirmación oficial, se espera que tome el testigo de la Presidencia del país el actual Vicepresidente primero, Miguel Díaz-Canel, de 57 años, quien se ha mostrado partidario de seguir una línea continuista en el modelo socialista cubano.
Fuente: Reforma