Sopa de codito con crema y chipotle, cerdo en salsa de ciruela, ensalada de manzana y el tradicional ponche formarán el menú por la celebración de Año Nuevo para quienes sean remitidos al Centro de Sanciones Administrativas y de Integración Social, mejor conocido como El Torito, por conducir bajo los efectos del alcohol.
“Para quien guste, ahí vamos a tener cena de Año Nuevo. Prometemos también y hemos dado la instrucción que se tengan los tradicionales chilaquiles para la mañana, así que tanto su cena como los chilaquiles estarán garantizados en El Torito”, precisó el Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera.
El dato
EN NAVIDAD la CDMX reportó 25 por ciento menos en el número de canalizados
Mancera indicó que durante los festejos de Navidad, la ciudad registró una disminución de 25 por ciento en el número de automovilistas remitidos al Torito.
“Creo que las personas están tomando en serio este programa y tomando conciencia de lo peligroso que es conducir bajo los efectos del alcohol. Así que la Ciudad de México tiene que seguir transitando en esta materia de reforzar su seguridad vial”, agregó.
De acuerdo con la Consejería Jurídica, durante el Operativo Especial de Navidad, sólo 14 hombres fueron llevados al Centro de Sanciones Administrativas.
Este organismo detalló que desde la tarde del 24 de diciembre y hasta la madrugada del 25 entrevistó a 13 mil 155 personas y aplicó 104 pruebas de alcoholemia.
Por otra parte, la Secretaría de Desarrollo Social de la capital también anunció que en los Centros de Asistencia e Integración Social (CAIS) serán recibidas las personas en situación de calle para celebrar el fin de año.
El gobierno de la CDMX estima que en las calles viven unas 4 mil 355 personas, ya sea por problemas económicos o familiares.
Estos centros atienden a niños, jóvenes, mujeres, hombres, adultos mayores y en general a las personas que sufren abandono, pobreza extrema o vulnerabilidad.
Los usuarios de los CAIS cuentan con atención asistida o supervisada para baño de regadera y alimentación, además corte de cabello, barba y uñas, entre otros servicios para elevar su calidad de vida y las posibilidades de reinserción o reincorporación a la vida comunitaria.
Fuente: La Razón