La Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) informó que “dada la gravedad de los hechos” de la masacre ocurrida en Temixco el pasado 30 de noviembre, que implicaría “lesa humanidad por las circunstancias”, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) decidió atraer la queja que inició de oficio su homóloga estatal.
De acuerdo con la información dada a conocer por el ombudsman local, “las violaciones a derechos humanos (ocurridas en Temixco) se consideran de lesa humanidad por las circunstancias en que se generaron, sumado al hermetismo de las autoridades estatales sobre el caso, la escasa información, la desinformación en torno al asunto y la falta de respuesta por la autoridad estatal”.
Según el titular de la Comisión local Jorge Arturo Olivares Brito, la masacre de Temixco, en la que fueron asesinadas cuatro mujeres, un adolescente y una bebé, será mejor atendida dado que la CNDH cuenta con recursos humanos, materiales y técnicos para que el asunto se atienda “con la eficacia y eficiencia que se amerita”.
En las horas posteriores a que se conocieran los hechos ocurridos en Temixco el pasado 30 de noviembre, la CEDH de Morelos inició queja de oficio –CDHM/SE/V3/061/295/2017– “misma que a la fecha no ha sido ratificada por los familiares de las víctimas.
“No obstante ese silencio, esta Comisión de derechos humanos solicitó los informes correspondientes y la aplicación de las medidas precautorias a efecto de garantizar la seguridad de los familiares de las víctimas, medidas que fueron atendidas y contestadas por la autoridad municipal, no así por la autoridad estatal”.
El ombudsman local informó que será la Primera Visitaduría de la CNDH, que dirige Ismael Eslava Pérez, “la responsable de atender la queja correspondiente en el organismo nacional defensor de los derechos humanos”. En tanto, la CEDH se mantendrá como “aliado y coadyuvante en la investigación de estos hechos” y en colaboración cercana, “siempre dispuestos a llevar a cabo cuántas acciones estén a nuestro alcance para lograr el esclarecimiento de estos lamentables hechos”.
El pasado 30 de noviembre, elementos de la Policía del Mando Único de Morelos, irrumpieron en varios domicilios donde realizaron detenciones. Según las distintas versiones, en el tercer domicilio, en la calle Francisco I Madero, ocurrió una balacera que dejó como saldo el asesinato de cuatro mujeres, un adolescente y una bebé, así como otros menores heridos.
Las circunstancias en las que ocurrió la masacre no han sido esclarecidas. La versión oficial es que las muertes fueron producto del fuego cruzado, sin embargo, hasta el momento los cinco detenidos durante los operativos, fueron puestos en libertad por violación al debido proceso o por falta de elementos probatorios. En tanto, la Fiscalía dijo que mantiene las investigaciones sobre los policías, pero hasta el momento no hay ningún detenido, imputado o procesado.
Fuente: La Jornada