Queda claro, no se militarizan las calles; al contrario, se pone orden. Durante la última década nuestro país ha atravesado por una crisis de seguridad, que rebasa el umbral de la seguridad pública y que pone en riesgo la seguridad interior. Por ello, debemos contar con una ley que legitime y dé certidumbre a las acciones relativas a la coadyuvancia de las Fuerzas Armadas con las autoridades civiles en materia de seguridad interior. Es importante señalar que, con la presente Ley, no se pretende que las Fuerzas Armadas estén al frente de las acciones de seguridad de manera permanente, falso el dicho, quien lo dice”, detalló Cristina Díaz, presidenta de la Comisión de Gobernación.