Andrés Manuel López Obrador afirmó que la prisión domiciliaria concedida a Elba Esther Gordillo es un derecho que ella tiene y se negó a opinar sobre un posible pacto entre la ex lideresa del magisterio y el Gobierno Federal.
«Fue una decisión que se tomó (que Gordillo ya esté en su casa) Miren, yo no hago leña leña del árbol caído, yo respeto mucho a la gente que está en las cárceles y que está en los hospitales, respeto mucho a los que pierden su libertad y a los que están enfermos, no me gusta hablar mal de ellos», dijo en conferencia de prensa.
«Es su derecho», sostuvo acerca del regreso de la ex líder del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, que esta mañana volvió a su penthouse de Polanco, desde donde responderá a los cargos por lavado de dinero y crimen organizado.
López Obrador no quiso especular sobre la coincidencia en el mismo día entre el desistimiento de la PGR para evitar la prisión domiciliar de Gordillo y la firma del convenio de coalición del PRI con el Partido Nueva Alianza (Panal), el jueves.
«No quiero especular porque yo lo mismo diría, que detrás del Frente Ciudadano por México, que es un fraude, detrás de ese frente está Salinas y la mafia del poder; entonces ¿para qué hacemos comentarios de ese tipo?», respondió.
Luego de un mitin de precampaña en el Estado de México, el aspirante por Morena aseguró que para abril o mayo el Frente del PAN, PRD y Movimiento Ciudadano se unirá la coalición del PRI, PVEM y Panal en contra de Morena, que hasta ahora, dijo, encabeza las encuestas.
«Van a aplicar para abril o para mayo el plan de descararse, quitarse la máscara, llamar a la unidad a todos los candidatos en contra de nosotros».
Afirmó que a pesar del apoyo propagandístico, ni José Antonio Meade, del PRI; ni Ricardo Anaya, del PAN, levantan en las encuestas.
«Los están inflando, pero no levantan, no llegan ni a burbuja», declaró.
El morenista reiteró el llamado a sus seguidores de la Ciudad de México, que ayer se enfrentaron con perredistas en Coyoacán, a que no caigan en las provocaciones del PRD, cuyos dirigentes, así como el Jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, sostuvo, están nerviosos ante la desventaja.
Planteó que en los mítines de Morena en la Ciudad de México podrían dejar las plazas y realizarse en auditorios cerrados para evitar provocaciones.
«Es lamentable que se den estas situaciones, sobre todo en donde gobierna un partido que viene de la lucha de izquierda. Ese partido ya se echó a perder, se corrompieron los dirigentes, son mafiosillos», dijo.
Fuente: Reforma