El secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, afirmó hoy que la decisión de su país de considerar Jerusalén la capital de Israel no prejuzga sobre el estatuto final de la ciudad, que estará en manos de las partes negociadoras.
Tillerson, que compareció ante la prensa en París junto a su homólogo francés, Jean-Yves Le Drian, señaló que la directiva de Donald Trump no asienta el estatuto final de Jerusalén.
Eso, precisó, «se deja a las partes para que negocien y decidan», al igual que la cuestión de las fronteras.
Preguntado sobre las medidas que toma su departamento para la transferencia de la embajada estadounidense de Tel Aviv a Jerusalén, insistió en la idea de que «necesitará tiempo», y no ocurrirá ni este año ni el próximo.
A ese respecto, hizo notar que habrá que construir el edificio y eso implica toda una serie de autorizaciones sobre las que dijo no tener dudas de que se conseguirán.
En cualquier caso, el jefe de la diplomacia estadounidense, que estaba en París para participar en una reunión del grupo internacional de apoyo para el Líbano, reiteró que Trump quiere que la mudanza de la legación diplomática se haga «lo más pronto posible».
Le Drian, por su parte, recordó que el reconocimiento de Jerusalén como capital de Israel es uno de los puntos en los que los dos países mantienen un «desacuerdo», pero subrayó que son «aliados históricos» y que como tales se dicen las cosas «serenamente» y «con franqueza».
Fuente: Crónica