La primera ministra británica, la conservadora Theresa May, ha acusado al presidente ruso, Vladímir Putin, de entrometerse en elecciones de otros países y de apoyar ataques cibernéticos, además de divulgar «noticias falsas».
En un banquete anoche en la City de Londres (centro financiero), del que se hacen eco hoy los medios, la jefa del Gobierno hizo el ataque más duro contra Rusia desde que asumió el poder el año pasado y acusó a Moscú de «sembrar la discordia en Occidente».
La «premier» dijo que el Gobierno de Putin busca perjudicar a las sociedades libres, si bien puntualizó que el Reino Unido no quiere una «eterna confrontación» con Rusia.
May subrayó que Putin debe elegir un camino diferente del que ha tomado en los últimos años por la anexión de Crimea y el lanzamiento de ataques cibernéticos en Parlamentos europeos.
«Rusia ha violado de manera reiterada el espacio nacional de varios países europeos y ha llevado a cabo una campaña sostenida de espionaje cibernético», dijo la líder conservadora.
«Esto ha incluido la intromisión en elecciones y el ataque (cibernético) del ministerio de Defensa danés y el Bundestag (Parlamento alemán), entre muchos otros», agregó.
«Nosotros sabemos lo que está haciendo y no lo conseguirá. Porque Usted subestima la resistencia de nuestras democracias», dijo.
Este ataque de May contrata con la posición del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien la semana pasada dijo que creía a Putin cuando éste negó haber intervenido en las elecciones presidenciales de EU de 2016.
Fuente: Crónica