El atentado perpetrado este martes en Manhattan (Nueva York), en el que han muerto ocho personas y once han resultado heridas, ha sido el undécimo ejecutado desde 2014 con vehículo y atropello masivo. El autor es Sayfullo Saipov, un uzbeko de 29 años que vivía en Nueva Jersey y que, según han publicado los medios locales, trabajaba como conductor de Uber en los últimos meses.
A las 15:05 horas del mediodía introdujo su camioneta en el carril bici de la autopista West Street, a la altura del cruce con Houston Street, y que recorre paralelamente el río Hudson desde Chelsea hasta el distrito financiero, cruzando ampliamente el barrio de Tribeca.
Recorrió cerca de 15 calles dirección sur de Manhattan y atropelló a numerosas personas que circulaban en bicicleta o caminaban por el carril. Finalmente, a la altura del cruce con la calle Chambers, el terrorista colisionó con un autobús escolar —hiriendo a dos adultos y dos niños— y abandonó el vehículo a pie frente al colegio Stuyvesant, portando una escopeta de perdigones y una pistola de bolas de pintura calle abajo.
Varios agentes de policía persiguieron a pie unos metros a Saipov y terminaron abatiéndolo, aunque permanece con vida en un hospital local y bajo custodia policial. Este atentado es el primer acto terrorista producido en Nueva York desde el que se produjera la explosión de una bomba casera en el barrio de Chelsea, en septiembre del pasado año, y que dejó 31 heridos leves.
El autor del atentado en Manhattan estaba «vinculado» al Estado Islámico
Saipov estaba «vinculado» al Estados Islámico y se radicalizó en Estados Unidos. El atacante, de 29 años, «es un depravado cobarde y estaba asociado con el IS», dijo el gobernador de Nueva York Andrew Como. De acuerdo con fuentes citadas por la cadena ‘ABC’, el autor del atentado llegó a Estados Unidos hace siete años beneficiado por un programa que ofrece una lotería de visados y al que acceden personas que tienen pocos emigrantes en Estados Unidos.
Según esta cadena, hasta hace poco el presunto terrorista vivía en la ciudad de Paterson, en Nueva Jersey, aunque también había residido en Tampa (Florida) y en Ohio.El presidente de Uzbekistán, Shabkat Mirziyoyev, ha expresado ya la disposición de su gobierno a colaborar en la investigación del atentado. «Uzbekistán está dispuesta a actuar con todas las fuerzas y todos los medios para colaborar en la investigación de ese atentado terrorista», señaló un comunicado del servicio de prensa presidencial.Una persona que asegura ser su amigo, Kobiljon Matkarov, también uzbeko, dijo al diario ‘New York Post’ desde el estado de Ohio, donde vive, que se había encontrado en Florida con Saipov hace cinco años, poco después de que el presunto terrorista llegara a EEUU.Según Matkarov, Saipov trabajaba para la compañía Uber y por lo menos hasta el verano pasado vivía en Nueva Jersey.La última vez que coincidieron ambos, según dijo Matkarov al ‘Post’, fue en junio pasado, cuando Saipov lo llevó al aeropuerto JFK, en una escala hacia Uzbekistán, acompañado de su esposa y sus cinco hijos. «Es un buen tipo, muy amistoso», agregó MatkarovDe acuerdo con el testimonio de personas que estaban en el lugar del atropello múltiple, el presunto autor gritó «Alá es grande», en árabe, cuando salió del vehículo después de que chocara contra un autobús escolar y tras atropellar a decenas de personas.Las cámaras de vigilancia de la calle West permitieron ver cómo el sospechoso caminó entre los coches antes de que la policía abriera fuego contra él. El terrorista, al que la Policía ha calificado como lobo solitario, fue trasladado a un hospital cercano para ser tratado. El atentado se produjo mientras la ciudad -especialmente los niños- se preparaban para celebrar la noche de Halloween y recorrer las calles reuniendo caramelos y dulces haciendo el clásico ‘truco y trato’.
Fuente: 20 Minutos/El Mundo
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