Al menos 215 productores de árboles de Navidad en el Estado de México esperan vender durante este fin de año 500 mil ejemplares de tres especies diferentes, lo que dejaría una derrama económica de 125 millones de pesos.

De acuerdo con la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR) y la Protectora de Bosques del Estado de México (PROBOSQUE), la entidad mexiquense es la mayor productora de árboles de Navidad a nivel nacional, al contar con 650 productores.

Sin embargo, sólo 215 tienen la posibilidad de comercializar su producto este 2017 debido a la madurez de sus árboles, que dependiendo de la especie (Pinus ayacahuite), oyamel (Abies religiosa) y pseudotsuga (Pseudotsuga menziesii), y la talla, el precio fluctúa entre 250 y 500 pesos.

La FONATOR y PROBOSQUE coincidieron en señalar que los 215 productores tienen disponibles una producción de 800 mil ejemplares, y que los municipios en los que se concentran la mayoría de las plantaciones son Amecameca, Valle de Bravo, Tlalmanalco, Almoloya de Juárez, Juchitepec, Xonacatlán, Xalatlaco, Tenango del Valle, Temascaltepec, Villa del Carbón, Zinacantepec, Isidro Fabela, Calimaya y Villa Victoria.

El Estado de México encabeza la lista de productores de árboles de navidad de todo el país, por encima de Guanajuato, Puebla y Michoacán, donde las plantaciones de este producto ayudan a que las superficies de baja productividad vuelvan a su vocación forestal, lo que implica servicios ambientales no sólo para las comunidades productoras sino para las ciudades.

En el caso de la producción de flor de Nochebuena, donde la entidad mexiquense ocupa el sexto lugar a nivel nacional, los floricultores esperan que en esta temporada se genere una derrama económica que supere los 92 millones 600 mil pesos, a través de la venta de casi 3 millones de macetas, principalmente a la ciudad de Monterrey.

Entre los principales municipios productores de esta flor se encuentran Atlacomulco, Malinalco, Ocuilan, Zumpahuacán, Texcoco y Donato Guerra, cuya reproducción de 12 variedades para este año es de 2 millones 806 mil 653 macetas, entre las que destacan la Prestige, Prestige red y Jingle bells Marblestar.

Aunque la entidad mexiquense es la sexta productora a nivel nacional de esta flor, después de los estados de Morelos, Michoacán, Ciudad de México, Puebla y Jalisco, “la Nochebuena mexiquense se distingue por tener la mejor calidad”.

Miguel Núñez Pérez, uno de los 300 productores de Atlacomulco que generan la mayor producción con sus 12 variedades, explicó que la semilla de Nochebuena comienza a sembrarse desde el mes de enero para que a finales de octubre, cuando comienza la distribución de las macetas, se tengan las plantas de mayores dimensiones, y en julio se siembran las más pequeñas, que van desde las 2.5 y hasta las 7 pulgadas.

La también llamada Cuetlaxóchitl, que en náhuatl quiere decir “flor de pétalos resistentes como el cuero”, se ha convertido no sólo en un símbolo de tradición navideña en nuestro país, también es un negocio millonario en el Estado de México, ya que sólo en esta comunidad la actividad del cultivo de Nochebuena genera más de 2 mil empleos directos y más de 20 mil indirectos. (EULALIO VICTORIA, CORRESPONSAL. EL FINANCIERO)