Este viernes fue inaugurado el nuevo acceso al Templo Mayor en la Ciudad de México, un espacio que a partir de este viernes contará con el recién inaugurado puente peatonal y las ventanas arqueológicas que conectan a míticos edificios coloniales de la capital del país.
El sitio albergará los más recientes descubrimientos históricos en el Recinto Sagrado de México-Tenochtitlan: las estructuras del Gran Basamento, principal centro ceremonial de los mexicas donde rendían culto a Huitzilopochtli.
Localizada a seis metros de profundidad, el área sustituirá la caseta que se encontraba al final de la calle Seminario, mientras que unas escaleras conducirán a un área donde se ubicarán las taquillas, mismo punto donde los visitantes podrán apreciar el algunos de los vestigios que fueron encontrados por el Proyecto de Arqueología Urbana (PAU), entre ellos, el Cuauhxicalco y un piso de lápidas que narran el nacimiento de Huitzilopochtli.
El Jefe de Gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera, destacó que se trató de trabajos de más de siete años pero que ahora lograron una apertura “perfectamente planeada”, que abre paso a las futuras tareas de la iluminación del Templo que próximamente se presentarán para embellecer la vista de lugar cuando llegue la noche.
Asimismo, dijo, que abrir el espacio representa un nuevo símbolo que anima a la reedificación de otros sitios de la ciudad para “dignificar a muchas de las personas que hoy están padeciendo por sus espacios, por sus propiedades”, recalcó.
En los trabajos de remodelación y apertura también participó el Instituto de Antropología e Historia (INAH) y la Secretaría de Cultura del Gobierno de la República, autoridades a quienes Mancera Espinosa agradeció la coordinación y la entrega de los trabajos que habían sido retrasados por el sismo del pasado 19 de septiembre.
Ahora, el Museo del Templo Mayor, podrá ser visitado de martes a domingo de 09:00 a 17:00 horas, con precio de entrada general a 70 pesos por persona y de manera gratuita para estudiantes, maestros y adultos mayores con credencial vigente.
Fuente: Excélsior