El equipo de defensa legal de Roberto Borge Angulo, ex gobernador de Quintana Roo, presenta hoy a las 14:00 horas (tiempo del centro de México) un incidente de objeciones o apelación ante la Corte Suprema de Justicia de Panamá, para oponerse a la decisión del gobierno panameño de autorizar la extradición de su cliente a territorio mexicano para que enfrente a la justicia de su país.
El abogado panameño Carlos Carrillo informó este mediodía a El Universal que el incidente será planteado ante la Sala Segunda de lo Penal de la Corte y confirmó que Borge continúa la huelga de hambre que inició el pasado 20 de septiembre en protesta porque todavía sigue sin recibir tratamiento médico especializado sobre un problema renal crónico.
Carrillo denunció la semana pasada la violación de los derechos humanos de su cliente, quien es reclamado por México para juzgarle por los presuntos delitos de operaciones con recursos de procedencia ilícita o “lavado” de dinero, aprovechamiento ilícito del poder, peculado y desempeño irregular de función pública.
Como jerarca del equipo de defensa legal de Borge Angulo, el abogado acusó el pasado 25 de septiembre al gobierno panameño ante el pleno de la Corte de violar los derechos humanos de su cliente y aplicarle tortura psicológica por negarle acceso a un médico especializado que le atienda sus problemas renales crónicos.
Carrillo dijo a este diario que se trata de un “habeas corpus correctivo” por la situación de encarcelamiento que, según su alegato, es violatoria de los derechos humanos del político. Entre otros hechos que denunció, el abogado aseguró que, sin ninguna explicación, las autoridades panameñas decidieron que Borge permaneciera esposado en las distintas visitas que le hizo en los últimos días para coordinar asuntos del proceso de defensa.
Borge, de 37 años y cuya extradición a México fue autorizada el 15 de septiembre anterior por el gobierno panameño, cayó preso el 4 de junio en Panamá a solicitud mexicana para juzgarle por los distintos presuntos delitos.
El jueves 21 de septiembre, y por advertencias gubernamentales de riesgo de fuga, se le transfirió a una celda de la Policía Nacional en Ancón, suburbio del oeste capitalino, tras estar desde el 9 de junio en El Renacer, en las afueras de la ciudad y cerca del Canal de Panamá.
Fuente: El Universal