El Gobierno de México lamentó la decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien determinó dar por finalizado el Programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA).
A través de un comunicado de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) expresó la preocupación por la incertidumbre que a partir de ahora enfrentarán miles de jóvenes nacidos en México.
Precisó que aunque la determinación de la política migratoria en los Estados Unidos de América corresponde exclusivamente a los estadunidenses y a sus instituciones.
El embajador de México en Estados Unidos, Gerónimo Gutiérrez Fernández, aseveró que tras la cancelación del DACA, los «dreamers» están en una situación de incertidumbre jurídica, por lo que es imprescindible encontrar una solución legislativa.
«Nos estamos concentrando para que en el ámbito de lo que son las facultades diplomáticas que tenemos y respetando el marco legal de Estados Unidos, se logre esa legislación que les dé una situación jurídica estable y definitiva a todas esas personas».
En entrevista para el programa «José Cárdenas Informa», dijo que alrededor del 78 por ciento de los dreamers son mexicanos (622 mil de 800 mil jóvenes) y al cancelar este programa se urgió a legisladores de ambos partidos a que haya un nuevo marco legal en la materia.
Respecto a la intención de la Casa Blanca de utilizar a los «dreamers» como una moneda de cambio para hacer lo del muro fronterizo, Gerónimo Gutiérrez Fernández precisó que es una posibilidad que no se debe descartar, por lo que «sería ingenuo pensar que ese escenario no pueda ser lo que está ocurriendo. Es perfectamente factible».
Sin embargo, reiteró que independientemente de cuáles sean las razones, México debe proteger a los «dreamers» y que darles una solución legislativa.