El gobernador de Carolina del Norte, Roy Cooper, declaró el estado de emergencia para prevenir una escasez de combustibles debido a los daños causados por el huracán Harvey en Texas y Louisiana.
“El daño causado por el huracán Harvey a las refinerías de Texas y Luisiana podría afectar a todo el sudeste, causando escasez y un aumento del precio de la gasolina. Estoy tomando medidas para facilitar la entrada de gasolina a nuestro estado para que los norcarolinos que necesiten combustible puedan tenerlo”, dijo el gobernador Cooper mediante un comunicado en el que anunció dos órdenes ejecutivas para afrontar la situación.
Una de las órdenes ejecutivas firmadas el jueves por Cooper declara el estado de emergencia en Carolina del Norte para levantar temporalmente ciertas restricciones que limitan las horas de servicio de los conductores de camiones que transportan los combustibles, así como el peso y medida de esos vehículos.
Dicha orden quedará en efecto por 30 días o hasta que se regularice la situación de las refinerías afectadas por el huracán Harvey, según indica el documento firmado por Cooper.
El gobernador firmó otra orden ejecutiva para declarar una alteración anormal del mercado de las gasolinas en Carolina del Norte, la cual pone en efecto por 45 días la ley estatal contra la especulación de precios.
El objetivo de dicha orden ejecutiva, es prevenir que los proveedores de combustibles aprovechen la situación de emergencia para subir excesivamente los precios de la gasolina y otros combustibles.
Fuente: Mundo Hispánico