Una jornada histórica para el tenis español, que por vez primera hará doblete en los ranking mundiales ATP y WTA. Rafa Nadal conserva el liderato tomado tres semanas atrás, adornado con el título del US Open, y Garbiñe Muguruza asciende al trono.
Tercer país que consigue monopolizar las clasificaciones individuales a la vez, tras Estados Unidos y Alemania. EE.UU. se ha permitido este hito varias veces, con dúos de muchos quilates: Jimmy Connors-Chris Evert, Connors-Martina Navratilova, John McEnroe-Navratilova, McEnroe-Evert, McEnroe-Traccy Austin, Pete Sampras-Monica Seles (ésta última nacionalizada estadounidense y compartiendo nº 1 con Graf tras haber sido acuchillada en la pista de Hamburgo), Andre Agassi-Monica Seles (todavía ella bajo la protección especial de la WTA), Pete Sampras-Lindsay Davenport y Andre Agassi-Serena Williams.
Alemania vivió unas semanas de plenitud gracias a Steffi Graf y Boris Becker, en 1991.
Rafa Nadal inicia su semana 145 global al frente de la lista ATP, cuarta seguida desde que volviera a mandar el 21 de agosto. Pudo disfrutar paulatinamente del regreso ya que se confirmó antes de iniciar su andadura en el Masters 1.000 ATP de Cincinnati, en cuanto Roger Federer renunció a participar en el mismo alegando molestias en la espalda.
En el US Open, el suizo quedó fuera en cuartos, ante el argentino Juan Martín del Potro, y se apartó asimismo de la lucha por el nº 1, que continuará hasta la conclusión de la campaña, primero en Asia y después en el periplo ‘indoor’ europeo.
Nadal vive una cuarta etapa en el nº 1. Se estrenó el 18 de agosto de 2008, al día siguiente de colgarse el oro individual en los Juegos Olímpicos de Pekín. Lo entregó 46 semanas después, duró hasta el 5 de julio de 2009. Segundo episodio de 56 semanas, entre el 7 de junio de 2010 y el 3 de julio de 2011. El tercero se prolongó durante 39 semanas, del 7 de octubre de 2013 al 6 de julio de 2014.
En la salida del US Open, hasta ocho tenistas con posibilidades matemáticas de irse de Nueva York con el número uno mundial que defendía la checa Karolina Pliskova, después de haberlo logrado el 17 de julio pasado.
Hubo criba enseguida de favoritas: La rumana Simona Halep cayó en el debut ya que el sorteo la cruzó con la rusa Maria Sharapova. No aguantaron mucho más la danesa Caroline Wozniacki, la británica Johanna Konta, y la rusa Svetlana Kuznetsova. Quien hizo mejor torneo fue la estadounidense Venus Williams, pero cuando se plantó en semifinales, eliminada por Sloane Stephens, ya no contaba porque dependía de otras, entre ellas Muguruza.
La española precisaba como mínimo presentarse en la ronda de octavos, y lo consiguió. Hasta esta edición no había tan siquiera pasado de la segunda. No pudo con la zurda checa Petra Kvitova, y tuvo que esperar los fallos ajenos.
Se borró primero la ucraniana Elina Svitolina, obligada a estar en ‘semis’ pero que tampoco se libró del KO en octavos. Pliskova seguía número uno si sobrevivía hasta la final, como en 2016, pero claudicó en cuartos contra Coco Vandeweghe. Ello quería decir que Muguruza se convertía en la segunda española reina en individuales del WTA Tour.
Campeona este curso de Wimbledon y Cincinnati, sucediendo a Arantxa Sánchez, nº 1 el 6 de febrero de 2015. Sumó 12 semanas, más en dobles, 111. Quinta tenista española en la cima, contando en el masculino a Rafa Nadal, Juan Carlos Ferrero (8 de septiembre de 2003) y Carlos Moyà (15 de marzo de 1999).
Fuente: Mundo Deportivo