Moisés Kalach, director del Consejo Estratégico de Negociaciones Internacionales del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), dijo que la primera ronda de renegociaciones del Tratado de Libre Comercio de América Latina (TLCAN) terminó sin sorpresas, la postura de los tres países bastante consistente con lo que estuvieron diciendo en los últimos meses.
Entrevistado por José Cárdenas, dijo que él estuvo en el Cuarto de Junto, al lado de 150 empresarios de asociaciones y cámaras de comercio, además se tuvo la presencia de todos los presidente de las cúpulas de todos los sectores económicos.
«Yo diría sin sorpresas, es el primer comienzo, es la primera ronda y seguramente más adelante se tendrán avances una vez que termine la segunda ronda, indicó.
Expuso que el primer punto que el sector empresarial puso en la mesa fue lograr una buena negociación, no una negociación rápida y si puede ser buena y rápida, sería mejor.
Resaltó que la ventaja es que los equipos negociadores de los tres países se conocen, por lo menos los últimos tres años en medio de lo que fue el Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP), y se tiene un historial de socios comerciales, eso ayuda al proceso para que sea más ágil y más claro.
Asimismo, mencionó que hay técnicos muy experimentados que pueden poner temas en la mesa además de que se debe tener cautela y estar ocupados en ganar aliados en Estados Unidos, y bien organizados en seguir haciendo propuestas técnicas y sólidas dentro de los consejos y estar cerca de los negociadores para ayudar en lo que se pueda.
Sobre el tema laboral, el empresario mencionó que en el tema de la homologación de salarios, el sector empresarial no está dispuesto a transitar porque no se le puede meter la mano artificial al mundo laboral y básicamente creer que se van a equiparar los salarios, eso nos parece que está fuera de lugar.
«En el capítulo laboral hemos dicho que si son estándares muy altos para cumplimientos laborales, pues para que no haya trabajo para menores, que los trabajadores tengan sus derechos, y para que se les cumplan que en México se hace, y tenemos una reforma laboral que acaba de pasar constitucional y con las leyes secundarias en proceso, si es por ahí, con mucho gusto nos sentamos a discutir… pero en homologación de salarios si hemos puesto una ralla muy claramente».
Por último mencionó que el sector empresarial tiene todo un equipo técnico, hay 300 sectores y esos se separan de la política pública, es decir de la retórica y se busca una paquete comprensible y conveniente para nuestro país, y también para los intereses de Trump.