Enojados, desilusionados y sin boletos quedaron la mayor parte de los aficionados mexicanos a la NFL, que a partir de la nueve de la mañana intentaron comprar boletos para el partido del próximo 19 de noviembre que se jugará en el Estadio Azteca entre Raiders de Oakland y Patriotas de Nueva Inglaterra.
El sistema de venta fue un fiasco, según denunciaron cibernautas en redes sociales, ya que el portal de internet Ticketmaster no funcionó, ni siquiera para seleccionar lugares, como tampoco el intento de adquirir las entradas vía telefónica, cuyos costos oscilaban entre 650 y 6,500 pesos.
No obstante a los pocos minutos de anunciarse que los boletos de la preventa se habían terminado, ya estaban disponibles en la reventa con precios que alcanzan más de 71 mil pesos mexicanos en la zona de cabecera en especial bajo, bajo la condición de adquirir entre uno y diez boletos.
Dicha situación es muy similar a lo que ocurrió el año pasado en el partido entre Raiders y Texanos de Houston, cuando los boletos se agotaron en menos de una hora y de inmediato aparecieron en reventa a precios estratosféricos.
Para los propietarios de palcos y suites en el Estadio Azteca, el negocio del partido entre Oakland y Nueva Inglaterra podría resultar muy productivo, ya que la renta de un palco con capacidad para 15 personas el día del partido alcanza un precio de entre 250 mil y 300 mil pesos. Por lo que toca a las suites que pertenecen a diferentes empresas nacionales e internacionales, generalmente a los altos directivos se les invita sin costo alguno, en compañía de sus amigos y familiares.
Fuente: Omnia