Los cancilleres de 17 países de América Latina, reunidos en Lima, Perú, durante más de cinco horas, condenaron el martes la «ruptura del orden democrático en Venezuela» y anunciaron que «no reconocerán a la oficialista Asamblea Nacional Constituyente ni a los actos que emanen de ella por su carácter ilegítimo».
Los ministros de relaciones exteriores de Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Paraguay y Perú manifestaron en comunicado conjunto su «pleno respaldo y solidaridad» con la Asamblea Nacional (Congreso venezolano) de mayoría opositora, «democráticamente electa».
El canciller mexicano Luis Videgaray explicó que los países firmantes también acordaron que reconocerán únicamente «los contratos de endeudamiento, refinanciamiento de títulos, concesiones y contratos de obra pública» que firmen con el gobierno del presidente Nicolás Maduro si tienen la aprobación de la opositora Asamblea Nacional, en los casos que lo exige su Constitución.
Los cancilleres no acordaron ninguna suspensión de relaciones diplomáticas contra el gobierno venezolano; tampoco sanciones económicas
En Caracas, durante la Cumbre Extraordinaria de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), el canciller venezolano Jorge Arreaza calificó la reunión de Lima como una «mini OEA» y de ser parte de una conjura contra América que busca «darle piso político al imperialismo norteamericano para seguir agrediendo» a Venezuela.
La cita de Lima ocurre luego de que el sábado la alianza aduanera sudamericana Mercosur suspendió de forma indefinida a Venezuela por violar el orden democrático.
Fuente: La Razón