Con calles desiertas y barricadas inició hoy en varias ciudades de Venezuela el paro cívico de 24 horas convocado por la Oposición.
La huelga es una medida de protesta contra la iniciativa del Presidente Nicolás Maduro de llevar a cabo una Asamblea Nacional Constituyente para reescribir la Carta Magna del país petrolero.
Envalentonados tras recabar 7.5 millones de votos en un plebiscito no vinculante contra la Constituyente, los líderes opositores lanzaron la «hora cero», una escalada de las protestas callejeras que iniciaron en abril y en medio de las que han fallecido casi 100 personas.
Desde las 6:00 horas, los adversarios de Maduro llamaron a millones de personas a paralizar hoy Venezuela, azuzando el ya caldeado ambiente político y social.
En distintas zonas del país se suspendió el servicio de transporte privado. La cuenta oficial en Twitter del Metro de Caracas reportaba «pocos usuarios» en el inicio de la jornada laboral del país petrolero.
En el pasado, la participación en este tipo de protestas se vio menguada por amenazas del Gobierno a unos 3 millones de trabajadores de las empresas y bancos estatales.
En la capital, las Fuerzas de Seguridad arrojaron gases lacrimógenos a primeras horas del día en algunas urbanizaciones del oeste, para dispersar a vecinos que intentaban colocar barricadas en las avenidas principales.
Las autopistas en el arranque del día lucían despejadas, añadieron los testigos.
Venezuela atraviesa una de las peores crisis de su historia contemporánea con la inflación más alta del mundo, recesión económica y escasez de alimentos y medicinas.
La Oposición señala al Mandatario socialista como el principal responsable del descalabro económico, pero Maduro se defiende al asegurar que es víctima de una supuesta guerra económica de sus adversarios que sólo buscan desbancarlo antes que culmine su mandato, a principios del 2019.
El Presidente propuso la elección de una Asamblea Nacional Constituyente para reformar la Constitución, lo cual, según el Chavismo, será un mecanismo para pacificar al país.
A pesar que la Oposición no participará en la elección de los constituyentes el 30 de julio y que diversos Gobiernos de América instaron a Maduro a respetar la voluntad de los millones que el domingo rechazaron su propuesta, el Mandatario insistió en que la Constituyente se hará aunque llueva, truene o relampaguee.
Fuente: Reforma
1 comentario
Realmente Maduro es un Tirano y debe ser derrocado, y los países de la OCDE deben señalar abiertamente y criticar por escrito su actuación antidemocratica y retirar sus relaciones diplomáticas y que le retiren sus relaciones diplomáticas, si no lo hace la OCDE sirve para nada.